Me han disparado con balas de veneno,
me hicieron mucho daño, en sus tiempos,
y hasta podría mostraros sus cicatrices,
pero ahora no,
ahora me siento inmune a tanto veneno,
me disparan igualmente
pero ahora tengo el poder de adelantarme al disparo,
y entonces sé por donde va ir la bala,
y todo consiste en poner mi cuerpo en dirección contraria,
así de fácil y así de simple,
antes le daba vueltas y más vueltas a todo
y ahora, no me complico,
por ahí me van a matar
media vuelta y por el lado contrario,
por ahí me van a herir gravemente,
quieto, parado
y me hago estatua de sal,
ahora me paseo con mis radares activados,
y a la mínima sospecha,
me hago ovillo y anulo todo el sonido
y hasta hay veces que me hiberno
y hasta la próxima primavera en que nos volveremos a ver.