LOS GUSTOS (Pensamiento)

Es hora de ver el primer partido del año, digo del verano, y veré el estreno de Neiymar con Messi, si se quieren o no se quieren o se quieren un poquito y si se apoyan y si se besan y si se abrazan lo suficiente y donde se rasca uno y donde se rasca el otro. Nos contarán si están contentos o tristes, si mamá les riño el otro día y si su infancia fue desgraciada. Y en eso consistirá el partido, pero pese a todo eso, a mi me gusta el fútbol y le quiteré el volumen al partido o según como vayan de lanzados los comentaristas se los dejaré muy bajito. Tampoco me gustan los partidos sin volumen, pues disfruto oyendo los cánticos de la selva y que alguien comente de verdad el partido.

                                   Yo soy del Barça, como podía ser de otro equipo, pero me tocó esa rifa en la tómbola. Después podía decir todos los tópicos de siempre, los que se dicen para justificarse que te guste un determinado equipo: que si me gusta por su juego, si juegan a otro fútbol y demás gilipolladas y estupideces, para al final concluir, que a mi me gusta ese equipo porque me sale de los cojones. Que manía de buscar porqués a las cosas o acaso una persona te gusta por lo inteligente o lo guapa que es o porque es muy simpática o muy entrañable o habla también y dice cosas tan interesantes. Pues yo me temo que no, que las cualidades personales de cada uno no son sumativas y a ti te atrae la persona que sume más puntos. Pues no es así, una persona te gusta porque sí o porque tú le ves un algo indefinido y digo algo INDEFINIDO, que te atrae y eso que tú le ves, pasa con frecuencia que no se lo ven las demás personas. ¿O me equivoco?.

                                  Pues con un equipo de fútbol o de cualquier cosa pasa lo mismo, tú te haces de él y sin saber porqué. A lo mejor porque un día te pilló despistado y empanado y estabas sensible y débil y viste un partido de ese equipo y te entró en el fondo de tú corazón. Hay tantas cosas inexplicables y una de ellas es el gusto personal de cada uno. A veces depende de cosas tan banales, como si de pequeño fuiste al entrenamiento de ese equipo o tú tío era forofo de él o viste un reportaje que te tocó la fibra sensiblera. A saber. Como decía el otro, a mi me gusta el vino, el fútbol y las mujeres, pero yo supero al otro y a mi me gusta, además de las mujeres y el fútbol, (el vino me dejó de gustar), también el mar, los rios, los bosques, las montañas borrascosas, el campo, la ciudad, las grutas y es que en realidad me gusta todo lo que observo. Y ahora y con vuestro permiso, me voy a ver el partido.

LA PLAGA Y EL RAYO (Noticias frescas)

Hoy es viernes 2 de Agosto y el sol nos va derritiendo como caramelos y no encuentro razones para no pensar que quiero que pase éste día. Y eso que yo me agarro al tiempo, pero hay días en la vida que están hechos para cocinar a los humanos en salsa barbacoa. No sé quién tiene las llaves de la caldera, si lo supiera esto sería otra cosa, empezando porque le pondría un soplete en los huevos y así sabría lo que es pasar calor, calor de caldera. No se puede pensar, ni hablar, ni escribir, ni hacer nada, sólo vegetar en el sofá y es que ésta humedad ambiental es humedad de pecera. No me extrañaría ver pasar peces nadando por el aire, el aire es denso como el chicle y se masca y se come y entra en tú cabeza y en tús articulaciones y en fin, que te revienta por dentro y te deja echo un saco de mierda.

                            Y después de ésta reflexión tan profunda, debo de decir que tengo mucho que hacer y me tiene, por cojones, que dar igual el calor, el sudor y demás tonterías, me toca bregar en lo físico, y me tengo que poner previamente, el mono de faena. Dios me ha puesto de nuevo a prueba y me ha mandado una plaga desde el cielo, quiere ponerme en el brete y demostrarme quién coño manda. Tengo un amigo al que dios le mandó un rayo y le jodió el motor del pozo y como es otro ateo empedernido, como yo, pues dios también lo puso a prueba. Ya somos dos, que yo sepa. Una plaga y un rayo del carallo, ¡joder! como se pone dios, no se anda con chiquitas.

                          Pero que dios sea claro y diga lo que hay y si piensa ponerme a prueba varias veces hasta que yo me reconvierta, yo me rindo en éste mismo instante. Una prueba la pasó, pero ni una más, estoy hasta los huevos de pruebas y de juegos divinos y de plagas y de rayos y de hostias benditas. Que dios me perdone por mi pasado y desde hoy seré su más fiel servidor y hasta seré el primero de la clase, e iré todos los días a misa y daré muchas hostias en su nombre o sea por dios, por la patria y el Rey, y juro por dios que me arremangaré y me pondré a dar hostias a mansalva. Siempre hay algo positivo en todo lo que se hace.Veis el sólo pensamiento de dar hostias, ya me ha animado el día de caldera.

ALMA (Poema)

Vi que tenías una cicatriz en la mejilla,
y un tatuaje donde la espalda acaba,
y un sólo pendiente de plata,
y un  zarcillo en el ombligo,
y un deseo debajo de tú piel morena,
lo entendí, te lo juro que lo entendí,
entendí que habías pasado por mil batallas,
que habías luchado hasta la muerte,
y vi tú imagen desde lejos,
cansada y harta, hastiada y deformada,
y ya no querías más sangre enemiga,
sólo querías el placer de la quietud infinita,
y los olores a hierba recién cortada,
y disfrutar de los sabores de la fruta,
y jugar al escondite,
y rodearte de cariño y sentir como te arropan,
y notarte querida y amada
y un poco imprescindible,
y te lo juro que te entendí,
entendí tús necesidades vitales,
y vi tus ilusiones rotas,
y ahora te paso mi mano sobre tú pelo,
y escucho como palpitas de miedo,
eres mi alma, mi alma perdida,
mi luna, mi sol y mi estrella del cielo,
alma de las almas,
alma que me penetras,
y ahora, alma mía,
por fin, quédate y para siempre conmigo.

TE BUSQUÉ (Poema)

Te busqué,
te juro que te busqué,
te busqué en las bosques de abetos,
y seguí tú rastro entre las hojas caducas,
y removí lápidas y tumbas,
y crucé a nado lagos y rios,
y  llegué tan lejos, tan lejos,
que ví como nevaba en los desierto del Sáhara.

Te busqué,
te juro que te busqué,
y escalé por precipicios y montañas,
y me sumergí por debajo de los hielos,
y  jamás me cansé de buscarte,
y eso que a veces dudé,
 y dudé de encontrarte,
pero la duda era mi estimulo y mi compañera,
era mi luz ciega,
y mi dama de la noche,
y yo te busqué entre zarzas y piedras,
entre helechos y cuevas,
y entre los límites prohibidos,
y jamás te encontré, ni te vi,
ni escuché un murmullo lejano,
ni una palabra suelta,
ni un grito de socorro,
y menos un te quiero
o un sin ti me muero,
nada, no escuché nada,
y tanto fue el silencio de tú boca,
que pensé que ya no estabas viva.

Pero te juro que te busqué,
y es verdad que te di por perdida,
me debilité y aflojé mis alarmas,
y ahora de repente apareces de nuevo,
tal cual viajera del tiempo,
y yo sé que vienes desde el otro lado,
del más allá y de donde reinan los muertos,
y eres un ánima, un espectro,
un alma resentida y vengativa,
y ahora eres tú la que me buscas,
pues aquí estoy, de pie y mirando al frente,
digno y orgulloso y muerto de miedo,
y sólo espero el momento definitivo,
y en que mi cuello lo corte tú guadaña,
muerte yo te espero,
te espero ahora y te esperaré siempre.

ME ABURRO POR AQUÍ, ME ABURRO POR ALLÁ...

  Me aburro por aquí, me aburro por allá, haciendo esto o lo otro me aburro igualmente. O sea me aburro por los cuatro costados y me siento ...