MALDITO DUENDE

 


Maldito duende
que no me deja vivir en paz,
insiste con el bien y con el mal,
como si él supiera lo que es una cosa o la otra.
Yo en cambio, sé lo que es la maldad,
y de la bondad, sé bastante menos,
aunque me gusta jugar en la frontera de la vida,
y un día tiro una piedra
y otro día la tiro y escondo la mano,
me gusta ser y a la vez no ser,
me gustan la vitalidad de las flores en primavera
pero también e incluso más,
la caída de hojas caducas
en esa hermosa estación otoñal,
me gustan los paisajes lunáticos,
un desierto con un pequeño oasis
con tres palmeras sueltas,
dos dromedarios comiendo cuatro hierbas secas,
y unos cuantos hombres que dicen conocer el desierto.
Creo que me entusiasman los contrastes
y a una isla solitaria me llevaría
un  libro sin nombre ni apellidos,
una palmera para que me diera sombra y dátiles
y un río
un río con un precioso puente de piedra,
yo me sitúo en la isla
y además, pongo las ganas,
es sencillo,
construyo una choza
y pienso que vivo en un castillo.

B-52 (J.J. MILLÁS)

 


Una mariposa macho tiene menos envergadura que un B-52, pero es capaz de recorrer decenas de kilómetros, desafiando toda clase de obstáculos, para copular con una mariposa hembra. El B-52, por su parte, recorre miles de kilómetros sin otro objeto que el de amputar los brazos a un crío de 11 años. La mariposa macho perece de amor tras la cópula, mientras que el B-52 regresa sin un rasguño al punto de partida, donde da un trago y vuelve a la carga. No sabemos cuántas mariposas revientan cuando bombardeamos un mercado árabe, pero uno de los últimos proyectiles arrancó de cuajo las alas al pequeño Alí Smain, cuyos muñones se deberían exhibir desde mañana mismo junto a esa imagen en la que los 183 diputados del PP se aplaudían a sí mismos, con una excitación sexual incomprensible, después de haber votado en bloque un sí a la guerra.
Al poco del apareamiento, el abdomen de la mariposa hembra se abre y riega el campo de huevos fecundados. Al poco del arrebato venéreo de los populares, los abdómenes de los B-52 se abrieron y comenzaron a descargar sobre las casas de adobe una lluvia de fuego. La mariposa es el sueño de la oruga como el B-52 es el sueño de Aznar. Cada gusano sueña según sus complejos y la realidad es el resultado de esos sueños. Por cierto, que una cosa envidiable de la mariposa es que puede volar durante la cópula multiplicando así el placer de todos sus sentidos. Si a usted y a mí, pobres mortales ápteros, nos parece que flotamos en el aire al follar, imagínese lo que sería salir por la ventana durante el acoplamiento y tener un orgasmo en la vertical de Bagdad o de Manhattan.
También los B-52 se aparean en pleno vuelo. Quizá lo haya visto usted en la tele y tal vez se le hayan puesto los pelos de punta, como a mí, por la precisión con la que la verga de uno de los dos pájaros metálicos penetra en la abertura húmeda del otro. Sólo que en lugar de descargar sobre él unos gramos de dulce semen, lo llena de gasóleo hasta las cejas para prolongar su vuelo criminal. En este caso, se trata de un acoplamiento incestuoso, contra natura. De hecho, se lo hacen con la nave nodriza, o sea, con la que les amamanta, que es como si se lo hicieran con su puta madre.

TRES (Anne Carson)

 



Tres mujeres silenciosas en la mesa de la cocina.
La cocina de mi madre es oscura y pequeña pero del otro lado de la ventana
está el páramo, paralizado con hielo.
Se extiende hasta donde alcanza la vista
a lo largo de kilómetros planos hasta un cielo blanco sólido no iluminado.
Mamá y yo estamos masticando lechuga cuidadosamente.
El reloj de la pared de la cocina emite un bajo zumbido irregular que salta
una vez en el minuto justo de las doce.
Tengo a Emily pág. 216 abierta y apoyada sobre la azucarera
pero furtivamente estoy observando a mi madre.
Miles de preguntas chocan contra mis ojos desde adentro.
Mi madre está estudiando su lechuga.
Paso a la pág. 217.
“En mi fuga a través de la cocina tropecé con Hareton
quien ahorcaba una camada de cachorros
desde el respaldo de una silla en la puerta. . .”
Es como si a todas nos hubieran bajado dentro de una atmósfera de vidrio.
De tanto en tanto un comentario atraviesa el vidrio.
Impuestos en el lote de atrás. No es un buen melón,
falta para los melones.
La peluquera del pueblo encontró a Dios, cierra la tienda cada martes.
De nuevo hay ratones en el cajón de los repasadores.
Pequeñas bolitas. Mordieron
los bordes de las servilletas, si supieran
lo que cuestan las servilletas de papel hoy en día.
Esta noche llueve.
Mañana llueve.
Ese volcán en las Filipinas otra vez activo. Esa que no me acuerdo el nombre
Anderson se murió no Shirley no
la cantante de ópera. Negra.
Cáncer.
No estás comiendo tu guarnición, ¿no te gustan los pimientos?
Por la ventana puedo ver hojas muertas que atraviesan las tierras planas
y residuos de nieve herida por la mugre de los pinos.
En el centro del páramo
donde la tierra desciende hacia una depresión,
el hielo ha comenzado a abrirse.
Llegan aguas abiertas y negras
cuajadas como la ira. Mi madre habla repentinamente.
Esa psicoterapia no te está ayudando tanto, me parece.
No lo estás superando.
Mi madre tiene esa manera de resumir las cosas.
A ella nunca le había gustado Law
pero le gustaba la idea de que yo tuviera un hombre y que continuara con mi vida.
Pues él es de los que toman y tú de las que dan espero que funcione,
era todo lo que dijo después de haberlo conocido.
Dar y tomar eran sólo palabras para mí
en ese momento. Nunca antes había estado enamorada.
Era como una rueda que bajaba rodando una colina.
Pero temprano esta mañana mientras mamá dormía
y yo estaba abajo leyendo la parte de Cumbres Borrascosas
donde Heathcliff se aferra a la celosía durante la tormenta sollozando
¡Entra! ¡Entra! al fantasma del tesoro de su corazón,
caí de rodillas sobre la alfombra y también sollocé.
Ella sabe cómo ahorcar cachorros,
esa Emily.
No es como tomarse una aspirina, sabes, le respondo débilmente.
La Dra. Haw dice que el duelo es un proceso prolongado.
Ella frunce el ceño. ¿Y qué se logra
con todo ese remover el pasado?
Oh —extiendo las manos—
¡Yo me impongo! La miro directamente a los ojos.
Ella sonríe. Sí lo haces.

OTRO DOMINGO MÁS

 




Otro domingo más
y es otro domingo precioso del mes de junio,
y van varios que son muchos más de los que nos pensamos.
Hay domingos bestiales de necesidad,
domingos de claridad alucinante,
domingos de suave brisa de verano
y de ternura primaveral.
Hay domingos para enmarcar
y de hacerte una foto familiar.
Hay domingos que me remiten a mi infancia,
y más cuando se acompañan
de este maravilloso olor a mar,
de ese sabor a yodo con el que puedo más,
y de ese punto de sal en la lengua,
y con estas algas que parecen pulpos del más allá
a la vez que oigo la voz de mi madre diciéndome...
¡Javier, aún no te puedes bañar!.

MURIÓ CARLOS RUIZ ZAFÓN (Año 2.020)


Murió Carlos Ruiz Zafón, el novelista que imaginó una Barcelona gótica

Se hizo conocido mundialmente por la novela La sombra del Viento, que vendió más de 15 millones de ejemplares, y por la saga del Cementerio de los libros olvidados. Falleció víctima de un cáncer. 
La memoria atesora frases leídas como si fueran estribillos. “Cada libro, cada tomo que ves, tiene alma. El alma de quien lo escribió, y el alma de quienes lo leyeron y vivieron y soñaron con él. Cada vez que un libro cambia de manos, cada vez que alguien desliza la mirada por sus páginas, su espíritu crece y se hace fuerte”. Daniel Sempere, el protagonista de La sombra del viento que visita por primera vez el Cementerio de los Libros Olvidados, en una imaginaria Barcelona de la segunda posguerra, escucha las palabras de su padre. “Cuando una biblioteca desaparece, cuando una librería cierra sus puertas, cuando un libro se pierde en el olvido, los que conocemos este lugar, los guardianes, nos aseguramos de que llegue aquí. En este lugar, los libros que ya nadie recuerda, los libros que se han perdido en el tiempo, viven para siempre, esperando llegar algún día a las manos de un nuevo lector, de un nuevo espíritu”. El escritor español Carlos Ruiz Zafón, bautizado por el diario Corriere della Sera como “el Dickens de Barcelona”, murió a los 55 años en Los Ángeles, la ciudad donde vivía desde 1994, después de luchar durante más de dos años contra un cáncer de colon.

VIVO EN LA UÑA (Lola Andrés)

 


Vivo en la uña
de la voracidad
enferma
en la costra
de la abyecta
mirada
de la deflagración
y las matanzas.
Amo
me alimento
hago sexo
en el hangar del aire
cada vez más dentro
del aire
más adentro
de la vagina apátrida
dentro
de la pupila jugosa
del pezón.
Mi huerto
sabe a hierba
digerida despacio
mansamente
sin palabra.
Cada vez
más adentro
del poro de la lluvia
de las ingles
fecundas
de la tierra.

COMO AMIGOS (Pedro M. Martínez)

 

Como amigos


Te quiero, pero como amigos -me dijo-.
Ella no come amigos que yo sepa, sé que en un tiempo me comió entero y  entonces no me enteré, sé que hace no tanto me mordió el corazón, muy fuerte, hizo que se tambalearan mis límites, mi historia, mi sentido de lo que era norte y de lo que era sur, no se debe entrar a una gruta sin saber si dentro vive el oso salvaje del amor y menos si uno es propenso a dejarse devorar por la belleza, que era complicado pensar en ella mientras iba y venía por esta vida que a veces es muy sencilla y a veces dolorosamente complicada, imaginarla, imaginarnos mientras lo de fuera se obstinaba en ser como era o como debe ser y quién pone barreras al deseo, a las ganas de vivir, a tanto como hay por descubrir.       
Mis respetos enfurruñados a su casi santidad, a su castidad, a sus decisiones, a su vida,  a sus opciones, a sus silencios o a sus largas descripciones de lo que hace o cómo lo hace o a lo que no hace.
Mis respetos absolutos a la distancia, a la ausencia, a todo lo que ella quiera, para seguir siendo su amigo, aunque me coma.
Pero sé que a eso no se atreverá. 
(Y yo tampoco)

ME SONROJO AL VERTE

 



Me sonrojo al verte
me sonrojo al no verte,
me sonrojo cuando me quedo a medias entre el verte y el no verte.
Me sonrojo al pensarte
y a medida que desciendo por tu cuerpo
me sonrojo por dentro como un animal sacrificado
y hasta mis pulmones se tiñen de color sonrosado,
y hasta mi ira se rinde ante ti,
vos sos lo que siempre he soñado,
y como sueño que sois,
al despertarme sé que os habréis evaporado.

Consejos para escribir una novela

 


Cava un agujero


Es bueno tenerlo a mano porque la trama casi siempre te va a pedir en algún momento que escondas algo o a alguien.
Además, y esto es importante, tu objetivo al escribir ficción es hacer un agujero en el cerebro de quien lo lea. Que tu novela, pedazos y aspectos de ella, no se le olviden nunca.

UN PENSAMIENTO LIBRE COMO EL VIENTO

 


Quizá me debería asegurar
de decir solo cosas bonitas,
de hablar de la belleza que nos rodea,
de contar historias con final feliz,
de poner la sonrisa por delante,
de querer sin mirar a quién,
de ser amable sin más,
de ser empático y solidario...
pero para poder ser todo esto
antes debo pasar por mi propia depuradora:
sacaré mierda y chatarra,
sacudiré las sábanas de mi cama,
abriré ventanas y puertas,
haré el pino y para que caiga todo lo malo de mis bolsillos...
Quizá antes que nada 
me debería asegurar
que lo que diga sea verdadero o falso,
y de que lo que piense
no lleve bilis
ni ácidos corrosivos,
y que sea un pensamiento sin impuestos
y  libre de cadenas,
sin precio,
sin falsos honores,
sin firma de autor egocéntrico,
en definitiva que lo piense
sea un pensamiento libre como el viento.

HAY DOS FORMAS DE QUERER



Hay dos formas de querer:


se puede querer intensamente

o se puede querer cómodamente

y las dos son incompatibles.

La intensidad va reñida con la comodidad,

la intensidad necesita sacrificio y sangre

mucha sangre 

sangre a borbotones

y mucha pero mucha flexibilidad,

que no siempre se tendrá...

Y querer cómodamente

es querer mientras la cosa vaya bien y con viento a favor

pero al primer obstáculo...ese querer se viene abajo.

THOMAS BERNHARD

 


"EN LO QUE ME CONCIERNE, NO SOY UN 

ESCRITOR, SOY ALGUIEN QUE ESCRIBE…" 







A VECES NO LE ENCUENTRO SENTIDO A TODO


A veces no le encuentro sentido a todo.
Otras veces me encuentro en medio de la desolación de la nada
y en la mayoría de las veces
me desenvuelvo en tierra de nadie,
luchando entre el todo y la nada,
entre la razón y la pasión,
ntre la verdad y la mentira,
entre mi idea del querer
y entre la tuya...que seguirá siendo tuya...
y porque no pude conocer su significado.
A éstas alturas de la película
tampoco me preocupa demasiado
es más,
te puedo confirmar y a voz en grito,
que lo  nuestro formó parte de nuestra diminuta historia,
fue un granito de arena dentro de una playa,
además, después vino una ola
y ese granito de arena desapareció tras su estela.



LOS ÁNGELES DE LOS POBRES (J.J. Millás)


Me disponía a escribir un cuento sobre una mosca sin alas, cuando me enteré de que en los lugares donde hace mucho viento esa carencia está genéticamente institucionalizada porque constituye una ventaja. Se lo dije a mi psicoanalista:
-Hay lugares en los que alas estorban.
- ¿A quién le estorban? ¿En qué lugares? -preguntó.
-A las moscas, y en lugares donde el viento juega con los insectos voladores como una corriente de aire con las cenizas de carta de amor.
- ¿Y por qué me cuenta esto?
-Porque quería escribir un cuento sobre una mosca sin alas y ahora ya no sé si tiene sentido.
- ¿Y qué sentido tenía antes de enterarse de lo del viento?
-No sé. Siempre me llamó la atención que los ángeles y las moscas tuvieran en común esos órganos. El otro día estuve en el museo del Prado y me acerqué a ver La Anunciación, de Fra Angélico. ¿Lo recuerda?
-Creo que sí. El arcángel san Gabriel, anuncia a la Virgen que va a ser madre de Dios. Aparece también el Espíritu Santo en forma de paloma.
-Exacto. Pues estaba contemplándolo con cierto arrobo místico, pues se trata de una pintura que me gusta mucho por su aparente ingenuidad, cuando una mosca se posó sobre la paloma.
- ¿En el museo del Prado hay moscas?
-Había una por lo menos. Me pregunté por qué el Espíritu Santo no podría ser una mosca en vez de una paloma.
-Ya -dijo la terapeuta con tono de paciencia-. Y ahí es donde se le ocurrió el cuento de la mosca sin alas.
-Eso es.
-Pues no acabo de ver la asociación.
-Quizá no la haya.
De vuelta a casa, me metí en la cama porque me dolía mucho la cabeza, pero tardé en dormirme preguntándome si las moscas, tan abundantes en esta época del año, no tratan de decirnos algo fundamental con su presencia. Como ya he dicho en otras ocasiones, son los ángeles de los pobres.

¡BENDITA DEPENDENCIA LA MÍA!

 

Cada vez que el viento golpea mi puerta,
pienso que eres tú,
tengo el pensamiento viciado por esa carencia,
pero no importa,
de algo se tiene que depender
y si ese algo no tiene cuerpo ni tiene nombre
es como depender de cada amanecer,
¡bendita dependencia la mía!




ADICCIONES (Cisko Muñoz)


 

MI IDEA

 


La idea...
o mejor dicho...mi idea
era vivir sin miedo,
y aunque a mí
el miedo no me quita el sueño,
tengo que reconocer con humildad, mi derrota,
Por eso ahora mi idea es más temblorosa y más dubitativa que antes,
pero también es más humana 
y entonces mi idea de ahora es...
es vivir hoy
y ya veremos lo que ocurrirá mañana.

Yo, si viviera en otra tribu

 Yo, si viviera en otra tribu con distinto nombre y con otros apellidos sería el puto amo de mi mundo andaría por las aceras de mi pueblo ve...