LAS RATAS

Una Rata disfrazada de Perro.

Hoy leí una noticia que me llamó la atención. Rezaba que en China se vendía carne de cordero y en realidad era carne de rata. No sé pero el tamaño en éste caso si que importa, no veo claro a una rata del tamaño de un cordero, pero China es China y a lo mejor tiene criaderos de ratas y a base de hormonas y de productos transgénicos, dieron con la super-rata, la rata de las ratas. A lo mejor allí en cambio de pasear con los perros, llevan a las ratas de paseo y las domaron convenientemente y a lo mejor ya están humanizadas.
Todo esto me lo puedo suponer porque allí es un mundo distinto, pero no cabe en mi cabeza tener al lado una rata del tamaño de un perro. Yo desde luego no me fiaría mucho, a pesar de que estén domadas, su gen guerrero lo llevan puesto y cualquier día en que estés durmiendo, te dan un bocado y se comen un pie o una mano o el colgajo que llevamos los hombres entre las piernas. Me cuesta ver los duros a pesetas y puede ser que sea muy incrédulo, pero es que no me lo creo. Pero los chinos son avezados como serpientes y no sería raro el asunto, igual que cuando se inventaron la pólvora y nadie se lo creía, mientras tanto se fueron cargando con suma facilidad a todos los incrédulos.
Entonces cuidado con las ratas, yo desde que leí ésta noticia, les miro de otra manera, les miro con miedo sumiso y con respecto, pues quién me dice que lo que hacen en China con las ratas, no se pueda propagar como la peste. Entonces ya sabeis cuando veais a una rata, lo primero que teneis que hacer es besarle el culo, vamos para ir haciéndoles la pelota y ese sitio es muy bueno para ablandarlas. O acaso, ¡no creeís en el próximo advenimiento de las ratas!, yo si creo y por eso les beso el culo y les tengo un altar preparado para rendirles culto y jurar mi sumisión eterna. ¡¡Vivan las Ratas!!, reza un cartel que tengo puesto en el portal de mi santa casa.

EL PEZ GRANDE Y EL PEZ CHICO


Yo me acuerdo de la lluvia
y debe ser porque en donde vivo,
no llueve ni en los días festivos,
además,
a mi no me llueve por dentro y hace mucho tiempo
mi pozo de lágrimas está seco
y mi plasma es más sólido que líquido
y sin lluvia yo no me humedezco,
eso que imploro y bailo la danza de la lluvia todos los días
es más, es lo primero que hago de buena mañana,
me marco un tango en pelotas
en el muelle imaginario de mi pueblo
y dedicado a la salud de la lluvia...
y para que así vengan tiempos mejores y mojados.
Ahora mismo estoy escuchando a los Doors,
en otros tiempos fueron las reyes del ácido,
yo veo el desembarco de soldados en una playa de Vietnam
con los uniformes militares mojados
y puestos hasta las cejas de lo que fuera que se tomaran...
eso fue una película entre bélica y alucinatoria,
que se llamaba "Apocalypse now"
que fue película de culto y que lo sigue siendo
y ya el colmo de todas las escenas
es cuando en medio de aquél puto desembarco
a un general yanqui le da por decir,
que es hora de hacer surf
y vamos a ver
que no me cuenten
que el general no se había tomado droga al por mayor
porque en medio de aquél escenario tan surrealista y
aterrador,
con explosiones de bombas de napalm y trozos de metralla,
como se le ocurre al menda lo de hacer surf.
En total, tres millones de cuerpos de vietnamitas muertos
(he dicho 3.000.000...que se dice pronto)
los yanquis ni siquiera llegaron a los 60.000
(58.000 en concreto)
y fue una guerra para demostrar al mundo quién era el amo,
sólo que el amo no contaba con salir trasquilado
y pies en polvorosa y pies para que os quiero,
claro que después nos tocó tragar y sufrir
con todos esos traumas de veteranos de guerra yanquis,
y es de suponer que los vietnamitas
no sufrieron esos traumas,
(porque creo, que nadie se lo preguntó)
pero así es ésta puta vida que nos vendieron,
el pez grande se come al chico,
sólo que ésta vez, el pez chico le comió los huevos al grande.

El destino estaba escrito

 

El destino estaba escrito
en esas páginas en blanco.
El destino corría de tu mano,
y en aquél verano de azul y niebla,
nos despertamos sobre la arena,
abrimos los ojos y nos miramos,
hicimos el amor hasta casi el desmayo,
hablamos de nuestra luna llena,
soñamos el mismo sueño...
el que siempre hablaba de aquella noche de verano.
Nos acariciamos tanto que nos hicimos traslúcidos,
y aquella noche,
el suave viento del norte
nos envolvió como una crisálida,
fuimos durante ese tiempo,
parte de la curvatura del espacio,
un instante de equinoccio de verano,
y parte de un rayo de fuego lanzado a través de nuestras manos,
fuimos tanto y tan ardientes,
que hasta nos fundimos los dos en uno sólo.

MI TRAJE DE ESTOS DÍAS (Pandemia en el 2.020)



Con esto del covid 19,
y como sanitario que soy,
he observado
que hay alguna gente que te dice...
bueno usted se pone ese traje que le protege
y con eso usted está salvado
y yo me pregunto
¿salvado de qué?
del coronavirus puede ser,
pero del sofocón de la deshidratación
que uno tiene por sus adentros
de eso no me salva ni dios bendito
quién me salva a mi de ese agobio infinito,
de esa angustia trepidante,
de esa agorofobia desmedida,
de ese inmenso pavor,
de ese pánico tremendo y no a las alturas,
pánico a quedarte tieso como una mojama al sol
o como una momia seca dentro de su tumba...
para hablar de algo,
primero, hay que probar de lo que se habla
y segundo, hay que callar de vez en cuando,
es bueno el silencio
y el silencio en ésta cuarentena,
es algo muy agradecido,
hemos ganado en eso,
hemos perdido en muertes,
mis queridos viejos han sido diezmados
vamos quedando menos en la batalla diaria,
pero bueno, si alguien quiere una sauna gratis
que se enfunde dentro de un traje o mono de protección
y con todo éste calor de casi verano
(rondamos entre los 22 a 25 º)...
y esperemos que no le pique ni el chichi
ni los huevos,
porque se podrá morir en el intento,
y sólo me faltaba que a mis 64 años,
me tuvieran que rascar los huevos,
cuando yo me declaro autodidacta,
autogestionado y autocriticado,
yo mismo me machaco cuando me lo merezco
y me doy de latigazos como penitente que soy,
soy penitente,
pero no soy tonto
y no soy gilipollas,
el traje me lo tendré que poner igualmente,
pero que nadie me diga
joder... ¡que bien está usted protegido!.


 

Yo, si viviera en otra tribu

 Yo, si viviera en otra tribu con distinto nombre y con otros apellidos sería el puto amo de mi mundo andaría por las aceras de mi pueblo ve...