DECIDIDAMENTE...(Poema)

Decididamente somos lo que somos,

y somos parte del todo y somos parte de la nada,

somos lo que un día decidimos,

somos esa idea suspendida en el aire,

somos ese proyecto o esa parte del plan,

y decidimos lo que queremos ser,

y rechazamos la parte insípida de la vida,

la sin sustancia, la que sabe a nada,

la que huele a corcho y que siempre flota,

y sí,

 decididamente somos parte de una parte importante,

somos trozos de carne con nudos neuronales,

somos fibras musculares,

somos Cerebros andantes y no bienpensantes,

somos ojos, somos fondos de ojos,

somos retinas desprendidas,

somos paquetes de nervios y con haces de colores,

y tenemos número y fecha de caducidad,

yo, por ejemplo sé que me moriré vacío de todo, 

sin nada, sin versos y sin nadie que me acompañe,

me moriré sobre el mismo silencio de la noche.

MI YO Y YO (2º capítulo)

Y así fue...y así fue y a los 25 años parecía un viejo prematuro y es que de repente todos mis esquemas vitales y de pensamiento se quedaron hechos añicos y eso envejece a cualquiera. Bueno, yo en sí y por mi mismo no era ni soy de tener que esquematizar mi vida y mis planes, porque me gustaba y me gusta mucho el azar y la sorpresa, me gusta que la vida juegue al escondite conmigo, me gusta que de repente tenga que cambiar de idea y por tanto, de planes y el vuelta a empezar pero con otro rollo me entusiasma. Pero de aquellas, de aquellas tuve que adaptarme a los esquemas, pues me hice "revolucionario" a los 15 o 16 años y eso suponía tener que tragar los esquemas organizativos de aquél pequeño grupúsculo de alucinados y hasta los 25 años (que es cuando lo dejé definitivamente), tuve esa gran lucha interior: por un lado estaba mi propio caos y por el otro, estaba la puñetera disciplina. La verdad es que me vino bien un poco de disciplina y porque muchas veces y gracias a ella, me ayudó a ponerme las pilas y sobre todo, me ayudó a terminar las cosas o sea, que lo empezado tenía un fin y que las cosas hay que también valorarlas por el resultado.

En fin, en mi época "revolucionaria" aprendí muchas cosas y ese aprendizaje tuvo su peso en mí...pero con lo que YO  no contaba era que de repente y un buen día, se me cayeran mis esquemas al suelo. Como todas las roturas un día te decides y ese día piensas que fuiste demasiado bruto y porque tiendes a pensar que ese pensamiento roturista no seguía una evolución, cuando en realidad la seguía y era consecuente con el proceso de mis pensamientos. Pero claro, llega un día en donde hay que mojarse y hasta el cuello. Claro que, claro que me quedé cojo y manco y porque la cosa era demasiado grande y además, no sabía donde o como ponerme. Es decir, me faltaba una alternativa válida, me faltaba un fin y un proyecto.

Y por cubrir ese inmenso vacío me dediqué a vivir lo no vivido y a los 25 años me emborrachaba como si tuviera 15 años y empecé a vivir la vida nocturna. Vivía como los Vampiros, vivía la noche, dormía de buena mañana y parte de la tarde, es decir, casi me despertaba con la llegada de la noche. Fue una época muy dura y no por pasarlo bien, que lo pasaba, si no porque no sabía lo que pensaba y eso en mi tenía una poder devastador. Estaba inflado de vacío y en cada amanecer me hacía la misma pregunta: ¿qué es lo que quiero?. De aquellas buscaba soluciones raras o no tan raras y simplemente mezclaba drogas y más drogas con mis ideales profundamente lastimados y claro, no salía nada productivo y salían intenciones que después, no era capaz de concretar, porque pasado y drogado haces planes que ya en ese mismo momento ya sabes que no vas hacer. Pero bueno, la vida de aquél entonces transcurría entre borracheras y la heroína o la farlopa o lo que cayera en mis manos y con la intención de que esas drogas cubrieran mis ideales huecos.

Yo me acuerdo de hacer cosas o de ver cosas que no me cuadraban (porque no iban conmigo, ni con mi forma de ser y de pensar) y en aquel momento éste era mi razonamiento: sino me cuadraban los comportamientos y hechos, es que no estaba muy ciego y porque mi objetivo era ese, anularme como persona y el pensar era una parte de mis defectos y cuando hasta ese momento el pensar, decidir, opinar y luchar eran lo contrario, eran parte de mis mejores virtudes. En el fondo buscaba un consuelo, es más suplicaba un consuelo y en principio, sin importarme mucho ni poco de donde venía...porque en realidad después si que me importaba, porque el 90% de mi cuerpo no es de agua o sí... pero como mínimo y en la misma proporción lo son los pensamientos y los ideales. Durante esa época mi YO estuvo decaído y deprimido.

LO EXTRAÑO QUE HAY EN MI (Poema)

Lo extraño que hay en mi,

a veces crece y casi nunca decrece

y no me reconozco,

no sé...no sé quién soy,

me pierdo y no sé como volver,

y eso que tiro de un hilo invisible,

que se llama, cordura

pero me atasco en su puerta 

giratoria,

me quedo atrapado en su ecuanimidad,

y el 1, el 2 y el tres...

y de ahí no paso,

me quedo clavado en el 3

y ¿que son 3 sin el 100 o el 10?

o ¿porqué hasta el 3 y no el 2 o el 1?

y puede que sea porque me guste lo impar,

lo que no rima,

lo que no encaja

lo que se sale del cuadro,

y por eso me gusta tanto:

  la cara oculta de la Luna

    los misterios sin resolver,

      los días de lluvia y tormenta.

        el amor desencajado e inapropiado,

y las caricias en el amanecer...

OTOÑO...

Yo soy más de Invierno, mejor dicho soy más Otoñal que otra cosa y porque llegado el otoño (del cual solamente llevamos un día) poco a poco va cambiando mi filosofía vital y si ya antes era un ser solitario, pues ahora es como si viviera en una isla desierta. Del Otoño me gusta todo o casi todo. Me gustan sus olores a tierra mojada o a tierra húmeda y además, me encanta como se viste con esa inmensa variedad de musgos, de setas y de helechos y para que hablar de sus colores...sus colores son hechos por los dioses, esa marrón suave y tierno, ese amarillo pajizo, ese verde oliva recién mojado, ese azul cielo o ese gris amenazante.- Y además, llueve o suele llover y todo se limpia y hasta mi alma se limpia de malos pensamientos, aunque es verdad que algunos no se le limpia ni lloviendo lejía, pero por suerte y de momento, entran dentro de las excepciones o casos raros.

Me gusta el calor de mi estufa de leña y su aroma a madera quemada y hay quien dice que el inconveniente que tienen las chimeneas y estufas de leña es que la leña ensucia. Y yo les digo, que si se ensucia habrá que limpiarla y porque no hay mejor calor en el mundo, no hay calor más entrañable y confortable. En otoño mis dos grandes ilusiones son:
   - Encender la estufa de leña.
   - Ir a por setas.
   - Y podía añadir un tercer deseo: escribir con su tenue luz.

Creo que yo me haría de la secta del otoño perpetuo o bueno y para no pasarse dos o tres pueblos, erradicaría de la faz de la tierra al Verano y simplemente se lo añadiría al Otoño y por tanto serían 6 largos meses de Otoño y los otros 6 se los dejaría al Invierno y a la Primavera. Yo, a éstas alturas de mi vida, no puedo con el Sol y sus ardentías y sudores, vamos a ver...yo puedo con el Sol cuando está suave y tierno, cuando te acaricia con sus dedos templados la piel. Y cada año que pasa me es más difícil de aguantar su calor veraniego y pegajoso. Y quién sabe y quién sabe si dentro de 3 o 4 años, uno será capaz de reproducir con una impresora 3D las estaciones que uno quiere y así meto en la impresora algunas setas, un poco de musgo verde y amarillo, unas cuantas hojas secas y marrones, unos trocitos de leña (no muchos, no vaya a ser que se jopda la impresora) y ¡zasca! y ya tenemos un lindo y maravilloso Otoño.

Yo, si viviera en otra tribu

 Yo, si viviera en otra tribu con distinto nombre y con otros apellidos sería el puto amo de mi mundo andaría por las aceras de mi pueblo ve...