Agatha Christie

 "Aprendí que no se puede dar marcha atrás, que la esencia de la vida es ir hacia adelante. La vida, en realidad, es una calle de sentido único"














EL TREN DE LA VIDA

 Cuando llegue mi hora
y cuando mi hora llegue...
os dejaré escrito un deseo
desearé suerte a los que se quedan
y lo mejor para mis hijos,
me despediré con una última mirada,
y en el silencio más absoluto,
y solo roto por mi respiración agónica,
os entregaré en mano mi último deseo escrito.
Cuando yo me vaya,
no me temblará el pulso,
en tal caso derramaré unas lágrimas,
y os contaré al oído mi último secreto:
la vida me ha dado mucho
y yo le he correspondido,
pero en la vida siempre se llega tarde,
y ese es su verdadero problema,
el tren pasa cuando menos te lo esperas,
y pasa a la velocidad del vértigo,
y si no lo coges a tiempo,
el siguiente pasará aún más rápido,
y esta vez si que será tu elección definitiva,
o te subes a él o te quedas para siempre en el andén.
Pasaron tantos trenes delante de mis ojos,
tantos vagones repletos de sentimientos,
tanta ternura derramada por las vías, 
que hoy no doy crédito a lo que veo y siento,
pues estoy convencido,
que en una parte de mi vida 
me he dedicado a desperdiciar oportunidades.
Pero que sería de mí,
de mí sin haber metido la pata,
de mí sin nadar acontracorriente,
si yo soy lo que soy, 
y lo soy gracias a mis contradiciones,
pero por si sirve de algo,
y además, tengo necesidad de decirlo,
súbete al primer tren que pase por tu vida,
después siempre habrá tiempo de bajarte,
o de no bajarte nunca.




ESCALERA HASTA EL CIELO

 Tan cerca estuve de tocar el cielo,
que aún hoy en día, no me lo creo,
hasta pienso que lo toqué por un instante,
y en ese momento salté, salté y salté,
y salté tanto,
que lo  pellizqué
y le arranqué un trocito de su cuerpo.
Ahora guardo esa bolita de algodón,
dentro de mis sueños,
en la sección de mis sueños placenteros,
y en el apartado,
de mis sueños más extraordinarios.
De vez en cuando la saco y la admiro,
la toco y la retoco,
y van pasando las horas y la sigo tocando,
pues su tacto es piel de terciopelo,
y es especial, sensual y divina.
Del cielo vengo y hacia el cielo voy,
y no admito estaciones intermedias,
no creo en purgatorios y limbos,
creo más en cúmulos, nimbos y cirros,
creo en lo que veo,
en lo que veo, toco, oigo y siento,
y siento que me voy a instalar en el cielo,
a la vera de dios y cerca de santo job,
pues tengo ganado ese sillón a pulso,
gracias al don de mi infinita paciencia,
y a que sé...
y a que sé que me lo merezco,
y llegaré hasta él,
subiendo la escalera que llega hasta el cielo.




LA INTELIGENCIA EMOCIONAL

 De todas formas hay cosas que se pueden decir y otras que es mejor dejarlas de lado y todo porque en ese momento no quieres hacerlo o porque no te apetece hacer ese esfuerzo. Hablando objetivamente, hay algo dentro de tí que ejerce de censura o de pudor, que te frena de contar asuntos más personales. Supongo que de alguna manera eso nos pasa a todos y ya sea para contar algo en general o para contar sobre alguien en especifico. Pues el coco es el coco y el coco va discriminando si a este le puedo contar esto de esta manera determinada o tengo que contársela dándole otra forma y eso, si decides contárselo, pues hay cosas que nunca contarás a determinadas personas. Normal y tan normal y lógico. Yo podría deciros que a veces me siento inteligente y que otras, me siento un imbécil. Claro que para contar algo personal e íntimo, siempre es más fácil hacerlo cuando te sientes sagaz y perspicaz, que cuando te sientes patoso, espeso y un tanto deprimido.

Y hablando de inteligencia. Ahora está de moda la inteligencia emocional o grupal o social, bueno ahora, ya lleva un tiempo puesta sobre la palestra. Y como siempre que se pone de moda una teoría, se pone demasiado el acento en destruír a la otra, a la que antes había. Pero eso es ley de vida, primero destruyo y después construyo sobre las ruínas y el paso del tiempo, es el que va compensando el equilibrio entre la teoría destruída y la nueva. Porque ni una cosa ni la otra, ni el coeficiente intelectual de las personas es el culmen de la inteligencia, ni la capacidad de relación social y de saber liderar y hacer equipo, es la nueva panacea. Hay una síntesis de las dos, hay inteligencia personal y que en parte se nace con ella y por la otra se desarrolla con el aprendizaje y hay la inteligencia emocional, que es la que hace valerte como persona y dentro de la sociedad o sea es el desarrollo de saber relacionarte en grupo y por tanto socialmente.

Bueno, pues eso, que lo que importa es que cada uno desarrolle lo máximo que pueda y que sepa transmitirlo, lo que si ha quedado más que claro, que ahora ya no valen las ratas de laboratorio o los cerebritos empollones con test de inteligencia por las nubes, ahora si de verdad eres inteligente, tienes que saber hacer equipo y saber relacionarte con la gente y si de verdad eres tan inteligente, reitero, tiene que saber liderar. Eso es lo que dicen las nuevas pautas del comportamiento, las oficiales y las que vienen en los manuales de las buenas costumbres y mejores modales. Los que vamos por libre, eso ya lo sabíamos, pues ni es tan inteligente el sabelotodo, ni tampoco lo es el contador de chistes, pues los dos son un coñazo parecido, son dos tipos de seres que resultan ser insufribles.Ya sabéis los dos extremos siempre se tocan. Y un poco de cada cosa y asunto arreglado.




SUEÑOS


Aquél cálido verano en que te conocí, lo recuerdas, porque a mí no se me olvida. Recuerdas la luna llena y su luz. Recuerdas el atardecer sobre aquella playa. Recuerdas los pinos y su olor y su textura resinosa y como al llegar la noche la hoguera era nuestro más íntimo refugio. ¿Te acuerdas?. Yo sí me acuerdo. Me acuerdo de cuando me acariciabas o como te reías y enseñabas tus dientes de plata reluciente. Me acuerdo de tus pechos y como ibas desabrochando poco a poco tu camisa. Me acuerdo de hacer el amor sobre la húmeda arena o al lado del dulce calor de las llamas o dentro de la tienda entre aquél caos de ropa y sacos. O cuando bailábamos a la luz de la luna y con los cuerpos desnudos y acariciándonos como dos locos en medio de un pinar atlántico. Me acuerdo de tus besos y del olor de tu piel, de tus ojos color miel y de tu nariz pequeña. Me acuerdo de todo, de cada detalle, de cada segundo, de cada instante. Me acuerdo cuando hacíamos el amor en la bañera, de decirnos te quiero hasta el aburrimiento, de las noches en vela y todo por no dejar escapar ningún momento y porque para nosotros ese momento... podía ser el último. Digamos que intuíamos que ese momento que los dos sentíamos era como el preludio de una despedida.

Y así transcurrieron las noches y los días, los cuales parecían inagotables, pero los días iban desapareciendo y ellos arrastraban consigo las noches. Pues todo estaba ya escrito, todo estaba predeterminado, todo lo que hacíamos nos llevaba, sin saberlo, hacia la despedida y por eso intuíamos que lo nuestro acabaría escapándose como se escapa un puñado de arena entre los dedos. Y por eso, cada momento lo exprimíamos con todas nuestras fuerzas y así, hasta caer los dos juntos extenuados sobre la arena de aquella playa. Yo recuerdo estas cosas y podría recordar muchas otras, pero no quiero aburrirte por ser demasiado repetitivo, mis recuerdos son míos y nadie me los puede quitar, ni tan siquiera tú podrías y por supuesto, menos te dejaría que me los quitaras. Aunque a lo mejor tú también recuerdas todo como yo lo recuerdo y entonces y digo a lo mejor, aún podíamos de vez en cuando volver a revivirlos juntos, aunque sea a través de nuestros más hermosos sueños. No hay otra forma de vivir con los recuerdos, si no es así, recordándolos y nada más que recordándolos, pues si uno quiere darles forma y hacerlos reales, lo único que hará es que el dolor inunde el mundo de tus sueños y a partir de ahí, los recuerdos se harán insoportables. Por eso es mejor así, seguir solo soñando y sin más y sin menos.
Todas las reacciones




























UNA DE ESPÍAS

 Lo que es la vida... si EEUU espía, mejor dicho su Gobierno, pues eso es bueno para todos nosotros, pues es un bien que nos hacen, según ellos, claro. Pero si alguien dice algo o saca datos sobre su espionaje despiadado y sin medida, es un traidor a su patria y al mundo civilizado. Así es la vida, la vida tiene una vara de medir distinta para cada cosa y según quién maneje la vara es como la cosa funciona. Si ellos andan y entran en nuestro correos personales y buscan palabras clave, como Al Queda o terrorismo o bombas o aviones suicidas, pues está página ya está automáticamente controlada. Vamos a ver, el gobierno yanqui son los amos de la tierra y hasta del espacio adonde llegamos y si a los amos les pica la oreja, pues la oreja nos picará a todos. Así funciona la película.

¿Y donde está el límite?. El límite lo ponen ellos, nosotros ponemos el culo, con eso basta. Nosotros somos unos putos mandados y punto. De vez en cuando nos dejan echar unos cuantos votos en unas urnas y asunto arreglado, ya hemos cumplido con nuestro principal papel. Después los Gobiernos hacen lo que les da la gana y lo que le dicta su amo supremo, el Gobierno yanqui y nosotros seguiremos andando a dos velas y por tanto seguiremos sin enteramos de nada, pero antes nos hacen suponer que vivimos democráticamente y todo por echar un puto voto. Y es más, hasta hemos llegado a creernos que el internet era libre y democrático y que cada uno podía escribir lo que le daba la puta gana, pues ya veis, nos espían hasta cuando cagamos en la intimidad de nuestro water. Para ellos es bueno esto de escribir lo que queramos, así saben de que va el percal y que es lo que hay que vigilar de cerca.

Es curioso esto que digo, pues históricamente se repiten las mismas pautas. Se llegó a creer que con la prensa éramos más libres, más tarde pensamos que lo éramos con el teléfono fijo y después, con el móvil. Más tarde, fueron los libros o la televisión y últimamente, Internet y dentro de unos años será otra cosa distinta. Pero bueno, somos humanos y como tales siempre necesitamos depositar la esperanza en algo distinto, en algo nuevo y que suponemos que será definitivo. Y lo único que es definitivo, es que siempre nos están espiando, pues si ellos son los que crearon nuevas herramientas de uso común y generalizado y para poder comunicarse entre nosotros, al mismo tiempo, están pensando en como controlarlas. Ellos nos ofrecen esas herramientas y nosotros las cogemos pensando que son nuestras y poco nos dura la cosa, dura sólo hasta que empezamos a utilizarlas, ni más ni menos y justo hasta ese momento en concreto. Aunque siempre les queda un resquicio suelto y es por esa fisura, por donde podemos darles caña y dársela a tope. ¡¡Véis como la esperanza es lo último que se pierde!!.


 



LA MÍSTICA Y EL MONJE SHAOLÍ DE LOS COJONES

 .Acabo de leer algo sobre el monje shaolí (así se hacía llamar a si mismo), ese mismo monje de pacotilla que se cargó a una o varias tías y tenía un gimnasio de artes marciales y que me trae de cabeza. Pues toda su historia viene a confirmar mis sospechas. El tío estaba montado en el dólar y supongo que a base de sus atontados acólitos (supongo no, seguro). Y por otro lado, algunos empiezan el estudio de su perfil psicológico: que si era muy bajito, pues no pasaba de 1,60 y que su baja estatura la compensaba con su excesivo carácter agresivo. Después vendrá (esto me lo supongo) que fue infeliz en su infancia, que sufría malos tratos y que su padre se acabó largando de casa y por borracho, abusador, maltratador y pendenciero. Y saldrán en la tele testigos de su pueblo natal, que confirmarán ésta tesis de que era un acomplejado huraño, violento y tímido, vamos, un niño metido en si mismo y tirando a acomplejadito.

Esto que digo, es el proceso típico de como descarnar a un asesino buscando perfiles. Que me parece muy bien que se criminalice a un tío mierda como éste. Pero lo que no me parece también, es cuando se entra en aspectos procaces y siniestros, que van marcando un perfil que intenta decirnos que de niño fue maltratado por su padre, es decir, que es un asesino, pero que tuvo circunstancias que le llevaron a cometer sus actos asesinos o digámoslo de otra manera, que hay circunstancias que pueden explicar en parte porque el tío era así y que al final se convierten en circunstancias atenuantes, que al final, le acabarán aliviando un poco su condena. Es esa necesidad tan humana de querer explicarlo todo, de que sí, de que mató y no debía hacerlo, pero a ello le ayudó lo infeliz que fue, o lo mal que lo pasó en su infancia o que su padre le pegaba. No sé, es como si los humanos necesitáramos una explicación del porqué se mata, porque eso al fin y al cabo, eso nos deja dormir más tranquilos. 

Y por último, vuelvo a hacer la reflexión del otro día. Si el tío estaba montado en el dólar, ¿donde están ahora sus seguidores?, que debían ser muchos y con mucha pasta por el medio para mantener el nivel de vida de éste individuo. Todos ellos están callados como petos, supongo que se sentirán muy afectados y descolocados, pues su líder espiritual era un asesino despiadado y en cambio para ellos había sido un semidios o mejor dicho un semibuda en la tierra. De todas formas las personas que acuden a éste tipo de colgados, seguirán el mismo camino que seguían, sólo que ahora se colgarán de otro, de otro enano infiltrado en ésta sociedad tan pudiente y tan podrida y mientras lo encuentran, acudirán como locos a los miles de manuales de autoayuda, que más o menos vienen a decir lo mismo:

Que tus problemas dependen sólo de tí y que la solución a ellos la llevas dentro de ti y que hay que aprender a canalizar tú energía positiva, para que fluya y te inunde de espiritualismo y así llegues a alcanzar el paraíso. No ridiculizo, sólamente digo lo que observo y observo que cada día aumenta el número de sectas o como quiera llamárselas. La tortura que supone para una persona sentirse responsable de todo lo que pasa en el mundo y que ella misma es el propio ombligo  de si misma y por tanto culpable de todo lo que le pase, sólo se puede compensar con muchas dosis de mística. De mística elevada al cubo en un cerebro de mosquito.



.

DAÑOS COLATERALES

 Es verdad, que a veces tengo la sensación de pregonar en el desierto y que mis palabras escritas se quedan dentro de este pobre ordenador, pero como digo, es sólo una sensación subjetiva y que solo yo, veo. Bueno, más la tenía antes, cuando los tiempos eran de abundancia y casi nadie se preocupaba de tener un control emocional sobre el tener pasta y lo que valía era el que yo tengo más pasta que tú y por tanto, estoy por encima de tí. Sí, no hace tanto tiempo y ese pasado no puede olvidarse y porque tiene sus grandes enseñanzas.

La sociedad tiende a imitar a sus gobernantes y si los gobernantes dictaminan que hay que despilfarrar pasta a mansalva, pues algunos lo harán con sumo interés y siempre saldrán de primeros en la fotografía. Y si los valores sociales que se instauran son la venganza y la envidia y el tener más que el otro y mejor coche  y mejor casa que el vecino, pues nada, que es  como remover en la inmundicia humana y entonces sale a la superficie las cosas más repugnantes de ser humano. Y vamos a ver, el pueblo es el pueblo, pero eso no quiere decir que todos seamos igual de legales.

Y cuidado, porque algunos de estos aprendices de brujo, se quejan ahora de lo contrario y lloran su desdicha social, pero no lo hacen porque en el fondo quieran los mismos derechos que los demás, lo hacen pensado en utilizar a los demás, para de nuevo conseguir su anterior bienestar social. No olvidemos una cosa, que siempre hay ratas en las alcantarillas y que sólo esperan el momento propicio para salir a la superficie y si es a costa de ti y de los otros, pues es un daño colateral para conseguir llegar a su fin y que no es otro, que estar por encima de ti.




SANGRADOS

 Y hoy no sé porqué estoy sangrando por mi nariz. Epistaxis, se llama en plan médico y mira que hay diferencia semántica entre Epistaxis y que te sangre la nariz. Bueno ya sabéis que a los Galenos nos entusiasman las palabras raras y extrañas. Hacía mucho tiempo que no sangraba por la nariz, pues en mi infancia era un verdadero profesional de las epistaxis y hasta que me quemaron una vena que pasaba por no sé donde y que debía parecerse a una almorrana sangrante..., no dejé de tener esa sangría por la nariz.

Más adelante cambié de sitio de sangrado y empecé a sangrar por el culo y debido a una preciosa y floreciente almorrana que poco a poco fuí criando con todo mi amor y esmero. Y ni pomadas ni hostias benditas, higiene y el tener prohibido usar papel higiénico, fue la única solución. Desde esas, amo los bidés, pues hasta ese momento nunca había entendido su función (si fuera mujer, la hubiera entendido antes). Después de cagar me siento en el bidé y con agua templadita me lavo mi lindo culito y la verdad, es que ahora lo tengo como el de un bebé.

Ahora ya no sangro por fuera. Ahora sangro por mis adentros y ya no veo la sangre, pero noto su contínuo goteo. Porque mi alma ya no llora, mi alma sangra y tiene hemorragias en sábana. A veces, tengo que ir a hacerme una transfusión de concentrados de sangre al completo y porque cuando mi alma sangra, me produce un gran dolor y una anemia que te cagas. Pues en definitiva, hoy sangro por mi alma y al parecer, también por mi nariz. ¿Y como se llama en plan médico, cuando se sangra por el alma?, la medicina no sabe nada de almas y menos de un alma perdida como la mía.




CINISMO

 

El relajarse cuando estás en el curre y lo suficiente para escribir tranquilamente, es tarea casi imposible. La cosa va por pequeñas oleadas, dos minutos relajado y después se tensa la membrana del Cerebro y tira de la neuronas para arriba y al final, el cerebro se queda como un moño justo encima del occipucio. Como véis soy un hacha en el parloteo médico y uso las palabras técnicas y científicas médicas con gran desparpajo. Es lo que tenemos los que somos espabilados y además tenemos carrera.

De todas formas mi lenguaje médico es tipo marciano, uso de vez en cuando un nombre médico, para después cagarla. Yo soy médico, pero también soy un tío de la calle y mezclo ambos lenguajes y lo hago porque me da la gana y no para que los demás me entiendan mejor, pues el que no me entienda, ¡coño!, que estudie y que espabile, que después uno va a un Banco explotador y le hablan de la Bolsa, de las querencias, de las hipotecas a todo riesgo, del Ibex 35 y estos mismos señoros  que a veces tanto protestan cuando alguien les toca lo que ellos consideran su dinero, vamos nosotros y no les decimos nada (a los de los bancos explotadores).

¿Que pasa con éste tema?, que sí lo dice un Banco ¡hay que joderse!. Aún encima que viven de nuestra pasta gansa y de sus muchas veces negocietes ilegales, vamos y no les protestamos. Es como las colas, las malditas colas que hay en todos los sitios, pues pasa que si una cola es para un papeleo médico, administrativo o para resolver cualquier asunto relacionado con el Estado, se monta un pifostio fantástico y con razón, pero si la cola es un Banco, todos son lindas ovejitas que no dicen nada. Y esto y perdonen que lo diga a voz en alto, se llama, CINISMO y manifiesta una cosa bastante guarra, que somos unos CAGADOS y punto.

 



JUGUETITOS

 Si Atila levantara la cabeza y viera que en el mundo actual, ya nadie como persona arrasa y personalmente con nada y que de toda esa mierda de matar, se encargan las putas máquinas sin más, yo creo que el pobre Atila se quedaría de piedra. Ya nadie se mancha de sangre (literalmente hablando) y de cada vez menos, pues ahora coges un mando a distancia y con un juguetito con alas o con hélices, bombardeas a tus enemigos y a todo lo que se menea y por supuesto, los matas y los destrozas. Bueno eso dicen los yanquis, cuando venden que sus juguetitos son cojonudos para matar enemigos, después no lo son tanto y porque por el mundo quedan vivas muchas tropas de fanáticos y empezando por ellos mismos.

Pero ¡coño! si quieres vender el juguetito, primero, tienes que convencerte de que funciona y entrenas en tu casa, por ejemplo matando moscas. Y si arrasas con todas las moscas, es que el aparatito funciona. Pero hablando de este tema, del de las moscas, también te venden auténticos pufos y yo hoy casi me he intoxicado con el insecticida de marras y juro que alguna mosca cayó muerta y tiesa y porque lo he visto con mis propios ojos, pero la mayoría siguieron vivitas y coleando. Y eso que trae una mosca muerta en la propaganda del tarro que me vendieron como un matamoscas de lo más eficaz.

O sea que no hay que fiarse de nada o de casi nada y porque juegan con nuestros intereses y si tu estás interesado en cargarte todas las moscas de la casa y ves que el insecticida no sirve para nada, ¡cuidado! porque intentarán venderte su próximo producto, que pueden ser misiles antimoscas o si no te venderán un GPS que localice y por vía satélite, cada mosca de tu puta casa y  si lo compras de regalo te darán un móvil de última generación y como dirían algunos, ya tendrías instalado el 5 G en tu casa. Y todo para espiarte como se debe.


 




PACTO DE SILENCIO

 Hoy fuí al cine, todo un acontecimiento para mí, teniendo en cuenta que hacía muchos meses que no iba. Bueno, me entusiasmó como siempre que voy a ver una buena película y cada vez que me pasa esto, me juro y me perjuro que tengo que ir más veces al cine. Después todo se queda en el departamento de juramentos  incumplidos que justamente, nunca serán cumplidos. Bueno, vamos al grano, la película que fuí a ver era, "Pacto de silencio", de Robert Redford y todo un elenco de buenos actores. Me gustó y digamos que sobre todo me sorprendió y me explico. Me gustó porque está bien narrada y al mismo tiempo es dinámica e inteligentemente narrada y si tengo que poner un pero, es a la interpretación de Robert Redford en su papel de padre. Estaba demasiado acartonado y sobrecargado de empalago como padre y con perdón, parecía más el abuelo de la chiquilla, que el padre (como un poco me pasa a mí con mis hijos). Pero quitando este pequeño fleco, en general me gustó.

Y la película me sorprendió por el tema planteado, pues es un tema que me toca muy de cerca y eso fue lo que en realidad pasó, que me tocó la fibra sensible y me hizo entrar en otras épocas que tenía almacenadas en algún rincón de mi memoria. El caso, es que el tema va de un grupo revolucionario estudiantil, que decide pasar a la acción y pone unas cuantas bombas y atraca un banco y con la mala suerte, de que en el atraco se cargan a un pasma o un segurata. Y la película empieza a narrar la vida de los protagonistas del atraco 30 años después y como viven camuflados y sobre todo como superviven en una sociedad en la que ya no creen o mejor dicho en la que nunca creyeron, aunque lógicamente se arrepienten de haberse cargado a un tío. 

Bueno y aquí entro yo, pues me hace pensar y recordar lo que siempre pensé, que una vez que has dado el salto al otro lado o sea que has visto a esta sociedad desde la trastienda, tú puedes haber cambiado y hasta ser un ciudadano ejemplar, pero ya no hay forma de que tragues el pasteleo de que estamos ante una sociedad justa, democrática y solidaria. Es decir, quedas marcado de por vida y puedes adaptarte socialmente e incluso puedes hacer lo contrario de lo que piensas, pero que en el fondo ya nunca conseguirás cambiar de idea y esta idea, es que vivimos en una sociedad injusta y clasista. Es como haber conocido un restaurante por dentro desde su misma cocina, ya puede venderte ese restaurante, los mejores platos del mundo, pero como tú ya sabes como se cocinan y se elaboran los platos, ya no cambiarás de idea hasta que te demuestren que lo elaboran de otra forma totalmente distinta. Pues esto es igual, porque en tu análisis social, confundido no lo estás mucho, otra cosa muy distinta son las diferentes alternativas que se plantean como salida a esta sociedad profundamente injusta, pero eso es harina de otro costal y de lo que ya hablaré otro día.


 




ROJO SANGRE

  Hoy he ido a devolver unos muestrarios de pinturas, de pinturas de brocha gorda, pues últimamente es mi principal trabajo y es debido a que estoy pintando mi casa. La puñetera casa, que es más grande que el palacio de Versalles. Consta de tres plantas y sótano y el sótano contiene un gran billar inglés, un snocker, que por cierto es jodido de jugar, ya que tiene unas bolas pequeñísimas y ya no hablamos de sus bocas, que parecen culos de pichón comprimidos. A lo que iba, quería pintar una pared de la sala y viendo el muestrario me dí cuenta que no tengo ni puta idea, pues me salieron tres colores bastante distintos: el rojo, el azul y el verde. Con lo cual ya me queda un tiempo para comerme más el tarro. Me preguntó la vendedora, que cual de los tres colores como médico, que al parecer soy, me daba más paz y me salió instantáneo: por supuesto el rojo Sangreee... era el que me producía más paz. Si me lo hubiera preguntado como persona, no sé cual le diría, pero se arriesgó a pedírmelo como médico. 

Y es que a mí me va la sangre, me encanta la sangre, eso no significa que me encante ver a gente desangrándose, ni que esté espachurrada o reventada, eso si que no,  bueno para ser sincero, un poquito si que me gusta. Pero es verdad que después paso unos días en los que tengo pesadillas, además que por el día, me siento como muy raro, raro de raro, raro, raro y raro. No señor, no me gustan esas animaladas tan grotescas y de tan mal gusto, pero es verdad que me gusta el color de la sangre y por mucho que digan los pintores, no hay en el mercado un color rojo parecido al color rojo de la sangre, bueno parecido sí, pero sólo parecido. Pues esos rojos que intentan imitar el rojo sanguíneo, les faltan los glóbulos rojos, esos pequeños glóbulos que rezuman vida y eso se nota, pues en la sangre sobre todo y por encima de todo, lo que hay es vida. 

Y el olor de la sangre, pues no sé si sabéis que la sangre huele y como huele y su olor es indefinido, es simplemente olor a sangre. Hay algo como amargo o agrio en el olor de sangre, pero tiene muchos más componentes olorificos que yo no sé definir con palabras. El olor a sangre sólo penetra en tu pituitaria, cuando alguien sangra a borbotones y en cantidades abismales. Quizá lo que más se parezca a ese olor, es el sabor de la sangre, por lo menos a mi me lo recuerda, cuando sangro por las narices o cuando chupo una herida, ahí me viene un regustillo parecido al que me produce al oler la sangre.

Pero a lo que iba, a mi de la sangre lo que más me entusiasma es su color, su color alegre y titiritero y que rezuma vida por sus cuatro puntos cardinales y no me extraña que los vampiros al ver la sangre les entre esa especie de "siroco" que los pone todo locos. Yo en cambio de chuparla (digo la sangre que no otra cosa), por mi juramento hipocrático me tengo que joder y es mi obligación tener que parar la hemorragia. !Maldito juramento!. Siempre pensé que cuando llegara a ser rico, cosa que ya veo difícil, en mi jardín yo quería tener una fuente, una fuente de la que manara sangre viva a borbotones. Un color digamos que para mí el más parecido al rojo sanguíneo, es el color rojo del vino. Del vino fresco, del vino antes de ser fermentado, pues aparte de su color rojo parecido, el vino antes de fermentar tiene altas dosis de energía, que no es vida pero como si lo fuera y eso de que no es vida habría que demostrarlo. Ese rojo del vino tinto, es rojo pasión, es sangre de la uva y también emite un olor muy característico, un olor de nuevo indefinido, que sólo huele a eso, a rojo del vino.

La sangre, ¡que gran vínculo!, el vínculo de la sangre. La sangre nos une y nos desune, por ella se pierden vidas y por ella también te condenan, te maltratan o asesinan. Lazos de sangre, hermanos de sangre, cuantas referencias a la sangre y como ellas determinan el ser o no ser de una misma familia. Hay infinitas referencias a la sangre y como determinan los lazos familiares. Pero no sólo eso, hay algunos colgados que determinaron que por un factor hereditario que hay en la sangre humana se podía saber a que raza pertenecías. Lo intentó demostrar Hitler y otros patrioteros de poca monta, que aún hoy en día hay repartidos y por desgracia, por el mundo. Son los peligrosos populistas que incluyen en sus discursos, la superioridad de su raza. Claro que si se sintieran inferiores, no lo reivindicarían.

A tanto llega la sangre, que a veces llega hasta al río, y algunos la usan para definir su alto abolengo, como la nobleza o realeza. Recurren a la sangre para diferenciarse y entonces, hablan de que ellos tienen sangre azul. Que color más feo para la sangre, que color tan poco apasionado para tanta vida que lleva en sus venas. El azul es ideal para el cielo, para el mar y para unas cuantas cosas más, pero no para darle el color a la sangre, eso sí que no. Aunque quién sabe, pues de tanta consanguinidad, al final el rojo se hace azul alicaído y medio muerto. 

Y como se definen las pequeñas y grandes escaramuzas, ya sea por una guerra, o por un conflicto cualquiera, entonces se habla de si corrió o no corrió la sangre. Si corrió la sangre, !que poesia maquiavélica!, pues corrió y que bonito era, como diría el otro. Y la otra expresión de "corrieron ríos de sangre", ésta aún es más bella poéticamente hablando. Las rosas rojas, por lo menos algunas, presentan un color rojo similar al de la sangre y digo similar, que no igual. Esa textura de una rosa roja y aderezada con unas gotas de rocío, a veces recuerda al rojo sangre, pero lo malo es que sólo le dura un día, pues al día siguiente ya esa rosa ha perdido frescor y vida, y por tanto, ya no es un rojo tan pasional y vital.



JULIO CORTÁZAR