Si volviera verte,
no sé muy bien lo que haría.
Quizá, me quedaría callado
y me fundiría mi cuerpo con el tuyo,
en un abrazo mudo,
sin palabras, sin reproches,
y así, en ese silencio sepuscral,
más tarde, nos despediríamos,
hasta más vernos.
Si volviera a verte, quizá,
te inundaría de caricias y deseos,
o te contaría un cuento de hadas,
en donde yo soy el príncipe,
y tú eres el hada madrina.
Si volviera a verte, quizá,
apoyaría mi cabeza en tú regazo,
y me dejaría arrullar con tú voz angelical.
Después,
me gustaría hablarte,
sobre las estrellas y la vida que hay en ellas,
para al final, cerrar los ojos,
y juntos oir los sonidos,
con que la noche nos obsequia.
Si volviera a verte, quizá,
te llevaría de viaje a otros mundos,
a otras galaxias, a Júpiter, a Saturno,
o a Neptuno, ¿quién sabe?,
pero lejos, muy lejos,
tanto o más allá de lo que vemos,
para así comenzar de nuevo,
lo que no fué y lo que pudo ser,
en aquél mismo instante ,
en donde nos conocimos.
no sé muy bien lo que haría.
Quizá, me quedaría callado
y me fundiría mi cuerpo con el tuyo,
en un abrazo mudo,
sin palabras, sin reproches,
y así, en ese silencio sepuscral,
más tarde, nos despediríamos,
hasta más vernos.
Si volviera a verte, quizá,
te inundaría de caricias y deseos,
o te contaría un cuento de hadas,
en donde yo soy el príncipe,
y tú eres el hada madrina.
Si volviera a verte, quizá,
apoyaría mi cabeza en tú regazo,
y me dejaría arrullar con tú voz angelical.
Después,
me gustaría hablarte,
sobre las estrellas y la vida que hay en ellas,
para al final, cerrar los ojos,
y juntos oir los sonidos,
con que la noche nos obsequia.
Si volviera a verte, quizá,
te llevaría de viaje a otros mundos,
a otras galaxias, a Júpiter, a Saturno,
o a Neptuno, ¿quién sabe?,
pero lejos, muy lejos,
tanto o más allá de lo que vemos,
para así comenzar de nuevo,
lo que no fué y lo que pudo ser,
en aquél mismo instante ,
en donde nos conocimos.