Que hoy es Martes, está más que claro y que es día 3 de Marzo, pues también. Hoy no hay nada importante que reseñar, vamos que haya algo de lo que va a depender el mundo, porque importante lo es todo y por tanto los detalles son importantes. Hoy he cumplido con mis rutinas, me he duchado, he desayunado y me he puesto a escribir y ahora me falta ese punto de sal que se le da a las comidas. Me falta la sal de la vida. Me falta el disparo que marque la salida, yo ya estoy preparado para ello, pero tiene que venir mi Musa para dispare.
Sin tema no hay nada. Claro que muchas veces empiezo sin un tema concreto o sea empiezo sin nada y por el camino va y salta la liebre. Pero de momento eso no pasa, sigo escribiendo sin saber hacia donde voy y es curioso, porque normalmente me brotan mil ideas a la vez y tengo que filtrar o seleccionar. Puede que en días como hoy, influya el tiempo, pues el día está en ese punto medio en que no se decide porque salga el sol, ni porque se ponga a llover.
Aparte que en mi mente tengo el que coño voy hacer de comida y como no me aclaro, ese pensamiento se hace envolvente. Como odio hacer la comida por rutina y es que no sé hacerla de otra manera, porque muy pocas veces tengo ese estímulo creativo con la comida. Yo no soy un Master Chef o un comiditas, mi imaginación la presto para otras cosas, para escribir, para sentir, para hacer el amor en la cocina y a falta de esto, para hacerme una paja, cosa que requiere un gran poder de imaginación.