¿Porqué que coño me sentiré tan cansado y harto?. Porqué leyendo historias de algunos personajes me entran unas inmensas ganas de decirles que cambien de idea o que por lo menos que cambien las formas y que dejen de dar tanto el coñazo. Pero me temo que eso es imposible, no sabrían que hacer. Y eso que al menda del que estoy hablando, lo he borrado y ya hace tiempo entre mis amigos del feisbuc ( de esos amiguillos que no son amigos de verdad, pero que tampoco son tus enemigos) pero el tío es tan plasta que se cuela igualmente por cualquier rendija o resquicio. ¿Y sabéis lo que es un pesadilla?, pues eso es lo que éste tío representa para mí. Mal sueño con él, me rompe y destroza mis mejores sueños. Y como el tío plasta tiene la misma constancia que un martillo pilón, me tiene de los nervios todo descontrolado. Hoy, os voy aconsejar que leáis éste articulo, que es muy interesante. Las libertades se ganan y se conquistan. El pueblo siempre lleva la razón y porque por algo es pueblo y yo soy el iluminado que hablo por él.
Siempre hablando desde el puto Púlpito y mostrándonos cual es el camino más correcto en nuestra fe de pueblo. Pues lleva años y años montado en su púlpito portátil, mejor dicho, lleva toda la vida subido a él y como ya pasa de los 70 años, ahora ya no hay quién lo baje. Debe ser muy duro a los 70 años, tener que apearse de todo lo que has sido hasta ese momento. Y yo no digo que no, pero los demás también somos humanos y no tenemos porque estar sufriendo ésta puta pesadilla de naúsea. El menda se considera el rey de la honradez y todo esto está muy bien y por ello le concedo la medalla al mérito civil, pero hasta ahí hemos llegado y en la vida hay muchas otras cosas que se puedan ver y disfrutar de ellas. No sé, dese usted señor un buen paseo y por la maravillosa orilla del mar. O váyase a pescar al currican. Pinte un cuadro al óleo. Haga un dibujo. Escuche buena música. Lea muchos libros y no nos cuente lo que se ha leído.
Y muchas veces llego a pensar: ¿y no se dará cuenta que es un puto plasta?. Yo creo que se da cuenta, pero como no sabe hacer otra cosa...pues sigamos castigando a los de mi alrededor. Claro que hoy se me coló otra tipa que salía de las antípodas del más oscuro pensamiento y se declaraba marxista leninista pero de las de pura raza soviética. Vamos, a las que les encanta Stalin depurándose a medio país. Y viva la dictadura del proletariado y todas esa vainas que les gusta tanto decir a los que no ven más allá de la bandera del Partido Comunista con su hoz y su martillo. Pues aún quedan éste tipo de especímenes anclados en el puto pasado. Yo creo que se quedaron en la revolución de la madre Rusia de 1.917 y de ese año no pasaron. Siguen viviendo en su limbo comunista y entre vivas al pueblo y puños alzados al viento. Ellos no han querido ver, lo que posteriormente hicieron sus camaradas con el puto pueblo y primero, lo diezmaron, después lo saquearon y para beneficio de una nueva clase política representada por las altas esferas del oxidado y viejo Partido Comunista. Claro que si la tipa me lee esto que digo, diría que soy el enemigo del pueblo infiltrado entre las filas del pueblo. Esto mismo, lo llevo oyendo toda la vida y cada vez que disentí con uno de estos sujetos tan de raza proletaria. Pues será verdad, que yo soy un puto contra revolucionario, que tengo cuernos afilados y rabo peludo y dientes de acero y además, me como a los niños pequeños...y después, voy escupiendo sus tiernos huesos.
Siempre hablando desde el puto Púlpito y mostrándonos cual es el camino más correcto en nuestra fe de pueblo. Pues lleva años y años montado en su púlpito portátil, mejor dicho, lleva toda la vida subido a él y como ya pasa de los 70 años, ahora ya no hay quién lo baje. Debe ser muy duro a los 70 años, tener que apearse de todo lo que has sido hasta ese momento. Y yo no digo que no, pero los demás también somos humanos y no tenemos porque estar sufriendo ésta puta pesadilla de naúsea. El menda se considera el rey de la honradez y todo esto está muy bien y por ello le concedo la medalla al mérito civil, pero hasta ahí hemos llegado y en la vida hay muchas otras cosas que se puedan ver y disfrutar de ellas. No sé, dese usted señor un buen paseo y por la maravillosa orilla del mar. O váyase a pescar al currican. Pinte un cuadro al óleo. Haga un dibujo. Escuche buena música. Lea muchos libros y no nos cuente lo que se ha leído.
Y muchas veces llego a pensar: ¿y no se dará cuenta que es un puto plasta?. Yo creo que se da cuenta, pero como no sabe hacer otra cosa...pues sigamos castigando a los de mi alrededor. Claro que hoy se me coló otra tipa que salía de las antípodas del más oscuro pensamiento y se declaraba marxista leninista pero de las de pura raza soviética. Vamos, a las que les encanta Stalin depurándose a medio país. Y viva la dictadura del proletariado y todas esa vainas que les gusta tanto decir a los que no ven más allá de la bandera del Partido Comunista con su hoz y su martillo. Pues aún quedan éste tipo de especímenes anclados en el puto pasado. Yo creo que se quedaron en la revolución de la madre Rusia de 1.917 y de ese año no pasaron. Siguen viviendo en su limbo comunista y entre vivas al pueblo y puños alzados al viento. Ellos no han querido ver, lo que posteriormente hicieron sus camaradas con el puto pueblo y primero, lo diezmaron, después lo saquearon y para beneficio de una nueva clase política representada por las altas esferas del oxidado y viejo Partido Comunista. Claro que si la tipa me lee esto que digo, diría que soy el enemigo del pueblo infiltrado entre las filas del pueblo. Esto mismo, lo llevo oyendo toda la vida y cada vez que disentí con uno de estos sujetos tan de raza proletaria. Pues será verdad, que yo soy un puto contra revolucionario, que tengo cuernos afilados y rabo peludo y dientes de acero y además, me como a los niños pequeños...y después, voy escupiendo sus tiernos huesos.