QUERIDOS Y QUERIDAS

 

Queridos compañeros y compañeras, yo terngo que contaros algunas sensaciones y con conclusionesa que he tenido a lo largo de ésta árdua, dura y aveces, alegre vida. Yo tengo que deciros, que veo que la vida cambia pero no tanto, que todo es relativo y que casi nada es absoluto, que casi nadie te quiere ni tú no quieres a casi nadie y aunque a veces jures lo contrario y con la insistencia del ciego que sólo desea ver. En fin, que de fondo tenemos los mismos problemas que antes, que igualmente siguen existiendo y persistiendo, que sólo cambian las formas pero lo que no cambia son los contenidos. Siempre acabamos hablando de amor y muerte o del porqué de nuestra existencia y como coño hemos llegado hasta aquí. Siempre las mismas vueltas y parecidas soluciones que fundamentalmente son falsas..., que si hay un dios que todo lo creó y que por eso respiras, que sino creemos en él es imposible entender la divinidad del divino (que no la magia que tiene la vida). Nadie es mejor que nadie y estoy más que harto de ese puto discurso. Nadie es mejor que nadie y hasta el momento justo donde se aparece uno que proclama que hay vida después de la muerte y que unos irán al cielo y por la gracia de dios y otros irán condenados y encadenados a las profundas aguas del infierno. Y el que se crea todo  su discurso dormirá y vivirá tranquilo y el que no se lo crea, tendrá que vivir de comer otras habichuelas,

Nadie es mejor que nadie decía el profeta y mientras lo decía escondía su sonrisa sarcártica bajo los pelos de su bigote o barba, Nadie es mejor que nadia hasta que aparece alguien que dice que habla en nombre de un ser supremo y que está por encima de todos nosotros y al que hay que agradecer que nosotros vivimos gracias a que nos ha creado en una tarde de domingo y donde se aburría como un condenado y porque hay tardes de domingo donde uno no sabe que hacer. Nos dió ojos, nos enfundo dentro de un esqueleto de huesos, nos dotó de músculos y fuerza, nos hizo andar y pensar, Nos dió opciones entre una manzana y una serpiente y nos prohibió follar, pero aún así, follamos. Y nos gustó el tema y tanto nos gustó que a pesar de haber pasado millones y millones de año, seguimos follando (yo no me incluyo y porque no follo desde hace años), Follar es un tema para los folladores y para los no folladores como yo, es un tema aparte que carece de la importancia que le conceden otros. Yo no follo y sigo vivo. Yo follé en mis tiempos y tampoco sacaría el follar fuera de contexto. Follar está muy bien para los que se va la vida en ello y para los otros, como yo, follar es un acto más dentro de ésta vida que nos tocó vivir. Follar es como llorar o reír o sentir amor y cuando el llama a tu puerta,





















HÉROE Y ANTIHÉROE


Nadie diría que me siento orgulloso y ufano de formar parte de un mundo que a pesar de todos sus desastres creados por seres innobles y despiadados. Digámoslo de otra forma, me siento orgulloso de ser parte de éste mundo agonizante y porque quiera o no quiera, me desborda la esperanza que hasta me sale por todos mis poros. En un mundo de mierda y casi apocalíptico, siempre sobrevive una persona buena y amable con sus congéneres y al final, hace pandi con ellos. Todas las historias y películas que tratan sobre el tema apocalíptico, versan sobre el mismo guión o parecido. Y porque sino no vende la cosa y tiene que salir el bueno y héroe a la palestra y que nos dirigirá en nuestra resurrección como seres humanos. Por nosotros mismos no seremos capaces de ello y por eso se sienten con el deber de crear un puto héroe que los guiará a la salvación humana. La historia del mundo siempre se escribió como el mismo guión: primero, la guerra y el desastre provocado por los mismos seres humanos, segunto, esto dará paso al caos y a la destrucción, pero esto sólo pasará hasta que aparezca un héroe para salvarnos a todos los que siguen en pie. Siempre hay un puto héroe que te guiará durante un rato y al día siguiente ya está pensando en instalarse en el mando de todo la que se está montando y como si todos nosotros fuéramos animalillos asustados siempre necesitados de un amo. que al fin y al cabo acabará haciendo lo que le da la real gana. Pobres de nosotros por ser tan débiles y necesitados.

El esquema religioso se basa en la mismo, en adorar a un ser supremo que se compadece de nosotros y por ser unos putos pecadores al que les preocupa más follar que comer. Y siempre y siempre gravitamos sobre el mismo tema y nos hacemos masa que necesita un líder. Yo no necesito un líder para nada y yo me declaro independiente y autosuficiente y espero que haya muchos más que piensan lo mismo o parecido. No hace falta que todos tengamos el mismo pensamiento y porque cuanto más variado sea el tema del pensamiento, nos irá mejor por la vida. Aunque claro, hay algunos que se suben a la parra demasiado pronto y tú cuando quieres hablar y opinar ya hay algunos que te cierran la boca y te acaban acusando de desviado o de contrarevolucionario o de traidor a la causa de la cual ellos pocos, se han apropiado. Al final, te venden la patria y las banderas y las fronteras y como si a mí, en algún momento me hubiera preocupado éste tema problema.

Yo no te digo, que yo tenga una alternativa global a todo lo que menea, pero sí tengo una buena lista de todo lo que no se debe hacer. Primero, yo no creo en los héroes salvadores. Segundo, mi vida y mi historia están por encima de la suya y yo no voy por una causa que no es la mía (en realidad, yo no moriría por ninguna causa, aunque sé que a veces hay circunstancias que te obligan a que tengan que escoger entre la cara A o B), Tercero, yo me podría definir como un buen chaval,  pero eso mismo no me convierte en un gilipollas que irá detrás de un líder que dice muchas cosas, pero que históricamente está demostrado que las decía mientras le convenía. Un héroe es el que lucha y se calla, el que avanza y sabe retroceder y es a la vez el héroe y el antihéroe.





























HAY GENTE QUE IRRADIA HUMANIDAD

 

Yo ahora que me elevo sobre un pedazo de tierra

y que me levanto por la mañana con la camisa desabrochada,

pienso que lo oscuro, al fin y al cabo, se hace claro

que a las tres de la mañana todos somos carnaza

para quién quiera llevarse un trozo de carne a la cama

y que cuando sale el sol por la punta del este

esperamos que ese día sea un gran día,

que alguien al verte sonría

y si no te ve, que sonría igualmente.

Nosotros somos de acero (lo digo por mí)

y hay gente que irradia humanidad.














Yo ahora que me elevo sobre un pedazo de tierra

y que me levanto por la mañana con la camisa desabrochada,

pienso que lo oscuro, al fin y al cabo, se hace claro

que a las tres de la mañana todos somos carnaza

para quién quiera llevarse un trozo de carne a la cama

y que cuando sale el sol por la punta del este

esperamos que ese día sea un gran día,

que alguien al verte sonría

y si no te ve, que sonría igualmente.

Nosotros somos de acero (lo digo por mí)

y hay gente que irradia humanidad.

NI CHICHA NI LIMONÁ

 

Y de cada vez por las redes sociales, me salen más anuncios de aplicaciones de gente madura tirando a pochita y arrugada, que quiere contactar contigo o con otro. Y yo digo, ¿para que quiero a éstas alturas de la película contactar con alguien que más o menos tiene la misma edad que yo?. Vender es una cosa y estafar al pringado de turno es otra muy distinta y al parecer la vejez es una edad ideal para que otros que van de listillos, te traten de engañar para sacarte la poca pasta que te queda. A mi dejarme sólo mientras pueda y cuando no pueda quizá me anote a susodicha aplicación, pero creo que lo haré para colarme en ella y así poder quemarla. Pero además, te ponen la foto de un pibón un poco tirando a viejo pero sin estarlo y guapa hasta el tuétano de sus tetas y tú mientras tanto echando pegamento a tu dentadura postiza y mientras babeas de hecho y de pensamiento. Y esa tipa tan potente y tan buena, ¿me va a cambiar los pañales a mí?. Y cuando llegue mi momento y porque a todos nos llega, y en donde no podré ni arrastrar mis santos huevos, tendré que plantearme una alternativa vital adaptada a esa realidad y por supuesto el tema no irá de enrollarse con una tía madurita y que dado tu estado paupérrimo, te va a limpiar tu viejo y lindo culito. Pero tampoco hagamos sangre del lado contrario y nos pongamos a pensar en un geriátrico que da más pena que gloria. Ni una cosa ni la otra. Ni yo soy más bueno ni tú eres un ángel caído del cielo. Supongo yo, que habrá puntos intermedios. Que existe la pausa, el momento tranquilo, la quietud de la tarde y no el olor a guiso demasiado pasado que se mezcla con el olor que da la carne vieja mezclado con el olor a meado de los pañales.

Ni chicha ni limoná. Ni me vendas esa moto. Ni me cuentes que hubo una señora  que con 60 años se lió con un hombre de 90 años y que se amaban y se querían. Que los hay y las hay, pero si los hay es porque siempre y por el medio, existía la pasta gansa que era lo que realmente les unía. Yo eso de que llamen cariño o amor mientras te dan de comer la papilla triturada y sin tropezones y te limpian los restos de comida y la baba que desborda tu vieja boca desdentada, como que no, que no me lo creo y si tengo que creérmelo es que ya hubo amor en otros tiempos. Me creo más que te consideren un viejo y que van abusar de ello. Me creo más que te vendan un seguro que cubra todos los gastos de tu muerte y para no dejarle todo ese tinglado engorroso a tus hijos. Que si caja de pino o de roble, que si el cura que dirige todo el circo tiene sus gastos propios, que si el médico que certica tu muerte también los tiene, que si hhay que llevar varios ramos o coronas de flores sobre el féretro y que te arreglan el careto de muerto y para parecer un muero que desearía seguir vivo. Y todo esto y más, para vender tu propio entierro en vida. A mí no me asusta mi propia muerte y me asustan mucho más todos los buitres que de repente dicen que les preocupa toda la parafernalia de tu propio entierro y funeral.

A mí que me entierren bajo un metro de tierra o que me incineren y que el polvo que quede que se los lleve el viento en un día de temporal. No quiero curas diciendo idioteces sobre lo bueno que era en vida y porque no lo era y además, el puto curita no me conoce de nada.















JULIO CORTÁZAR