LA PRIMAVERA Y LAS DEPILACIONES

Mañana empieza la Primavera y yo sin depilarme. Mañana, ¡coño mañana! y ahora mismo acabo de enterarme. Por el tiempo que hacía, más o menos lo sabía, pues ya llevaba días anunciándose, pero al final me cogió y como siempre de sorpresa. De sorpresa sorpresiva o sea que me cogió en pelotas y un tanto gordito y con esos pelos en los cojones que parecen cortinas. A partir de mañana un poco dieta o mucha y una depilación al completo, y que no me queden ni un solo pelo en el cuerpo. Me quedaré barbilampiño y seguiré medio gordito.

Lo de depilarse está bien o mal, pero yo no lo critico, cada uno puede hacer con sus pelos, si los tiene, lo que le de la gana. Ahora el pelamen de mis santos cojones no los toca ni la Virgen Bendita, solo los toco yo y ya me gustaría que los tocara alguien que me gustara. A ver, que mis cojones no son pelotas de fútbol, son dos bolitas envueltas en una bolsa y que se llama escroto y son míos y solo míos y no quiero ceras ardientes sobre ellos. Son delicados y cariñosos entre ellos, son dos hermanos gemelos que cuelgan del mismo cuerpo.

El depilarse es como cuando se afeitan los niños, se afeitan y después le crecen los pelos con más fuerza y como yo me conozco perfectamente, empiezo a depilarme y sé que no tengo fin en la faena y que no dejaré ni un solo pelo vivo. Pero pasan los meses y empiezo a aburrirme del tema y al final, ¿qué pasa?, que crecen con más fuerza y como en ese momento ya paso del tema, me salen matarroles en los cojones. Hay que ser estable para depilarse entero, estable mentalmente me refiero. Ahora si eres como yo, o  sea un puto cencerro de cabra, es mejor dejar crecer los pelos en su propia naturaleza. Ya me llega con tener que cortarme el pelo de la cabeza al cero y con afeitarme de vez en cuando.

De todas formas pienso que debo estar muy aburrido, pues que importa que mis cojones estén depilados o que estén pelados como lindas avellanas. ¡Con pelos o sin pelos son mis cojones benditos!.

DAME TU MANO (Poema)










Dame tu mano
y saltemos el charco,
dame tu mano
y juguemos a ser niños,
 risas, barro y piedras,
y el fango del río,
y si tu mano se pega a la mía,
 entonces ya no tengas miedo,
pues seremos un solo ser,
solo que con dos cabezas,
y con un solo sentimiento,
y sangre derramada sobre el agua,
y arañazos de la maleza,
y arena y arena y agua salada.

Dame tu mano,
y yo te daré la mía,
y juntos saltaremos muros ajenos,
y nos esconderemos de los adultos,
y juguemos y juguemos,
y juguemos entre los cañaverales,
y cantos y silbidos,
y un cigarrillo escondido,
y mientras afuera sigue la vida,
y otro mundo paralelo.

SI TÚ NO ME IMPORTARAS (Poema)

Si tú no me importaras,
no llamaría a las flores con tu nombre,
ni cabalgaría sobre un caballo blanco,
solo andaría descalzo y sin montura,
y desnudo y tal como vine al mundo.

Si tú no me importaras,
no te buscaría hasta en el fondo de los mares,
ni tu cara sería el mascarón de proa,
y tu rompiendo las olas,
y yo mirando tú cuerpo de sirena.

Si tú no me importaras,
no miraría a otros sitios,
mi mirada sería una espada
y una espada bien afilada,
y solo... y solo...,
y solo se clavaría en el fondo de tus ojos.

Si tú no me importaras,
hoy no estaría aquí,
aquí en donde escribo,
estaría lejos, muy lejos,
quizá en otra dimensión
o en el confín del Universo,
pero, ¡me importas!,
y tú lo sabes,
 y ¡me importas!,
y por eso éste poema te lo dedico.

ROSA ROJA (Poema)








Disparo a las sombras,
pero también disparo a la muerte,
y es que las rosas son flores bellas,
y más si son rosas rojas,
rojas apasionadas,
rojas de sangre,
y rojas de vida.

Disparo,
pero disparo sin balas,
pues sin sombras ni muerte,
no hay vida después de la muerte,
ni tampoco rosas,
ni rosas rojas,
ni siquiera hay pasiones escondidas.

Entiendo que no tengo explicaciones,
y que mis palabras redundan en la evidencia,
y yo puedo ser un ciego,
pero no un ciego de sentimientos,
quiero y quiero sentir más
y que mi olfato se sature de perfumes,
y necesito como agua de mayo
que mi alma se inunde de delicadezas,
pues soy un gourmet de los sentidos
y un sibarita de la vida,
necesito que alguien me de un beso
o un abrazo amigo,
y al final,
yo solo necesito un poco de cariño,
o que alguien me regale una rosa roja.

AHORA SOY...¡YO!(Poema)

Dejadme que os diga algo,
nací y salí por el canal del parto,
viví una infancia contradictoria,
llena de luces y de sombras,
y siempre estuve al lado del mar,
al lado del océano Atlántico.

Más tarde fui cumpliendo años,
y tuve una adolescencia revuelta,
luchas y manifestaciones,
piedras y cócteles molotov,
y días de tormentas,
pero fui feliz con lo que tenía,
y sino lo tenía, lo cogía,
eran tiempos inquietos,
y de revoluciones siempre pendientes.

La Universidad,
la Universidad fue una bomba de relojería,
y una explosión de los sentidos,
quise, amé y me rebelé,
y al final, no me quedé con nada,
tampoco era mi deseo apropiarme de algo,
pero había luchado por un mundo diferente,
y me encontré con el mismo mundo.

Después todo fue distinto,
estuve unos años perdido entre mis penas,
y me moví entre incertidumbres y drogas,
y drogas... y drogas....
y dudas... y dudas... y dudas,
y trabajé duro
y trabajé más duro,
y hubo años de felicidad palpable,
y ahora estoy aquí,
estoy donde siempre tuve que estar,
subido al pico más alto,
y en el puesto de vigía,
ahora... ahora solo disfruto,
y solo quiero recuperar mis años perdidos,
ahora soy yo,
yo con mis dos caras,
yo con mis fortalezas y debilidades,
yo en medio del mar Mediterráneo,
y soy yo,
pero luchando por ser mejor que antes.

MÁS VIEJO PERO MÁS HUMANO

De nuevo las 3 de la tarde y de nuevo entra el sol por mi ventana, pero hoy no me calienta o no me calienta lo suficiente. Tengo frío y tengo el cuerpo cortado. No sé, pero la recuperación post neumonía es más larga de lo que esperaba, mañana se cumplen 3 semanas. Y todos los días me pasa lo mismo, me levanto bien y y durante unas horas me siento el Rey de la tierra. Después vuelve la febrícula, el dolor de cabeza y el mal cuerpo, solo que hoy se ha adelantado la hora.

Dicen que si uno sabe estar mal, después sabrá estar bien. ¡Si es que yo tengo un cuerpo que no me lo merezco!. Lo he maltratado de todas las formas posibles, le he agredido, lo he pisado y como el Ave Fénix siempre resurgió de sus cenizas. Claro que después queda mellado de cicatrices, pero son cicatrices  y no heridas abiertas. A veces me cuelgo del cielo y me columpio y mientras lo hago, pienso que en ésta vida he tenido suerte y no me arrepiento de haberme conocido.

La suerte existe, como también existe la mala suerte. Existe porque no hay otra forma de explicar algunos hechos, como por ejemplo, como mi cuerpo ha sobrevivido a tanto dispendio, a tanto maltrato y a tanto desprecio. Mi cuerpo no es el que era, eso sí, tiene la misma estructura ósea solo que más desgastada, tiene los mismos músculos y articulaciones pero están más lacios y distendidos y tiene el mismo cerebro y éste es el único que ha progresado. Y ya no hablo de  colgajos sexuales, pues esos penden de un fino hilo, pero de momento aún no se cayeron al suelo. Así que más o menos sigo al completo, y más viejo pero más humano.

UNA ESTACIÓN (Poema)









Y no lo entiendo,
y yo camino con ese lastre,
y tenue es la luz de la vela
y efímera la luz de una cerilla,
y miro al cielo
y a ver si te encuentro,
y no lo entiendo
y todo porque no te veo.

Me cuesta ver el bosque,
y eso que hoy es un día claro,
no hay nubes, ni nieblas matutinas,
estoy solo yo y oteando el horizonte,
y juro que no lo entiendo,
pues veo, pero estoy ciego.

Quizá sería más fácil,
subirse a un arco iris,
y ponerme un pijama de rayas,
o coger un tren en marcha
y sin tener un destino fijo,
y solo caer en una estación sin nombre
y sin saber como se llama,
una estación abandonada a su suerte
y con un reloj que no funciona,
solo y rodeado de objetos inertes,
solo y con los mismos deseos por verte.

MARIPOSAS

Me estoy arrepintiendo de haber nacido en estos tiempos. Yo debí haber nacido en el Renacimiento, cuando triunfaban las ideas y se fomentaba el pensamiento. Ahora se cultivan los hongos de lo ruinoso y la cultura se ha convertido en moneda de cambio, pero en moneda  de cambio devaluada. Tiempos oscurantistas, tiempos de valores negros y tiempos de invernaderos. Me dan ganas de hibernarme en mi agujero y quedar en éste estado de capullo en el que vivo.

Lo que nunca comprendí es como una preciosa Mariposa puede salir de un asqueroso Capullo. Me trae de cabeza ese problema. Claro que hay que entender que la realidad  aún es peor, pues aparte del estado de Capullo también pasa por una fase de Gusano y entonces ya me descompongo y me vuelvo loco. Por eso odio a las Mariposas, pues por muchas alas coloridas que tengan, yo solo veo en ellas, Gusanos y Capullos previos. Si Dios quiso compensarnos y gratificarnos visualmente con las lindas Maripositas, pudo ahorrarse sus fases evolutivas y que una mariposa naciera ya Mariposa.

Pero Dios es muy pillo y es de los que te regalan algo con anverso y  con doble sentido. La belleza procede de lo feo y lo feo de lo bello. Vamos la pescadilla que se muerde la cola. Pero en éste caso que digo, pudo hacer una excepción, la excepción que confirma la regla. Pudo, pero no lo hizo, pudo, pero no quiso y pudo hacer tantas cosas y en cambio no hizo ninguna, que por eso nos dejó de herencia ésta mierda de Mundo y para que busquemos su belleza y a pesar de que dejó al mando unos cuantos perros guardianes, voraces y rabiosos, seguiremos buscando entre tanta miseria diaria.

NOCHES LOCAS

Antes la noche era la hostia. Era donde yo vivía y como un pez en el agua. Ahora ya no, ya no desde hace mucho tiempo, pues al llegar las 12 de la noche mis párpados se cierran como persianas. Pero durante un  tiempo largo la noche fue mi aliada y mi compañera de viaje. De noche hice mis actos más importantes, tanto positivos como negativos, y en cambio en aquellos tiempos, el día era la transición. Como los Hoteles, contabas los días por noches. La noche, las luces, la música, sí la música, las personas medio colocadas, sino colgadas y priva, mucha priva, priva en cada sitio, priva en la calle, priva en una botella.

La noche suena a desfase y no siempre fue así, pero sí que lo fue muchas veces. Y mientras salías de noche orgulloso de quién eras, todo iba bien, el problema era cuando estabas en horas bajas, entonces te arrastrabas por los bares como una babosa. Parecía que la noche agudizara tus miserias. Era el gran problema de la noche, que todo el circo que se montaba se preparaba partiendo de que tu estabas bien y por el simple hecho de no estarlo, ya eras denostado.

Por eso vivir de noche requiere un equilibrio mental alucinante. Tienes que ser el guerrero de la noche, fuerte, aguerrido y no demasiado borracho, para poder triunfar en la noche. Claro que triunfar se solía identificar con ligar y caer sobre una cama ajena. Había quién contaba estos "triunfos" como trofeos de caza y después se pavoneaba de ello. O sea que la noche en realidad no es tan ¡hostia!,en parte era vacía de sentimientos y de pensamientos, eran luces de neón y música fuerte, eran sensaciones de huída hacia no se sabe donde. Yo quise la noche y ahora quiero el día, pero eso no quita que de vez en cuando eche de menos las noches locas.

CURAS Y NIÑOS

"Dejad que los niños se acerquen a mi y ya veréis como les meto mano", debía pensar el cura de mi colegio. Pues su mano pasó por muchos culos impúberes y acarició nalgas frescas y muslos tiernos y mientras el cura babeaba de placer. No, no perdono y tampoco olvido y es que si solo fuera una oveja descarriada a lo mejor tenía un pase, pero no era solo uno, eran varios. ¿Traumas?, no, pero casi. Y es  que es más, pues el abuso sexual suele ir acompañado de violencia y ese mismo cura que te acariciaba el culo, al cabo de un rato, repartía una buena ración de hostias. ¿Esquizofrenia? o simplemente dos conductas complementarias.

Yo me apunto a lo segundo, que son las dos caras de la misma moneda. Y ahora, muchos años después veo que hay miles de personas y que en su día fueron niños y que estuvieron en mi situación, sino peor, pues muchos fueron violados sexualmente. Y hablan de que éste Papa es progresista y que se preocupa del pueblo, pues en éste tema solo ha echado más tierra encima. Yo empezaré a creer, no en dios pues eso es cuasi imposible, pero sí en el Papa y su tan cacareado progresismo, cuando destape ésta realidad ocultada.

Y no es rencor, es dolor. Dolor de impotencia, dolor de no haber podido gritar en su momento, dolor de ideas y de creencias, en definitiva, es dolor humano. Ellos, esos curas pederastas, se fueron o siguen de rositas y se sienten impugnes y lo que más me duele, es que siguen riéndose. Han metido mano hasta a las moscas del verano y solo les han dicho que se controlen un poco y que no sean tan descarados. Moderar vuestros instintos depravados, curillas. Yo creo que cortarles los huevos, se me quedaría corto.

RUIDOS

Si hoy es Miércoles, ¡que pasada!, si ayer debía ser Sábado y hoy Domingo. Por mucho que diga que el tiempo pasa, siempre pasa más rápido. Hoy es día 19 de Marzo y día del  Padre, menos mal que hay muchísimos Pepes y Pepas a los que felicitar y así se cubre el expediente de éste día. Ahora pensaba en que poco estoy acostumbrado a los ruidos, pues hay un tío martilleando en la calle y me molesta un huevo. Te acostumbras a vivir en ésta quietud ambiental y después un poco de jarana martillera y ya te alteras. Si aquí no hay ruidos, habelos hainos pero están amortiguados. Son ruidos acolchados y suaves, menos claro está éste puto martilleo.Ya se sabe, tocata a toda hostia y santo remedio.

Cuando el ruido es inevitable, solo se le puede combatir con más ruido y mejor que sea con un ruido cadencioso y melódico. Ahora, ¿quién me quita los ruidos dentro de mi cabeza? o ¿quién me quita mis alucinaciones?. Ni los psiquiatras han podido conmigo, soy un caso aparte, soy caoboy del espacio, soy un pirado orgulloso de su condición. No sé porqué pero me gusta presumir de lo que no soy y estaría encantado de estar un poco pirado, pero no mucho, solo lo suficiente para poder ver el mundo de otra forma y así dislocar los pensamientos. Pero soy demasiado cuerdo y soy demasiado lógico.

Lo único que me salva es que soy muy observador y por eso saco punta a los lápices. Pero nada más, no hay más debajo de ésta piel de sapo, solo hay vísceras, órganos y gases, muchos y excesivos gases y todo por esa café que me tomé, fuerte y agrio como la hiel. Tendré que suavizar el café, porque sino me voy a convertir en un sapo lleno de gases.

Yo, si viviera en otra tribu

 Yo, si viviera en otra tribu con distinto nombre y con otros apellidos sería el puto amo de mi mundo andaría por las aceras de mi pueblo ve...