Juana de Ibarbourou.


 «Ni mi alarido hizo temblar sus pétalos

ni apagó su fragancia mi agonía.

Era la rosa, la perfecta y única.

Nada la detenía».














 

Y os voy a contar un secreto



 Y os voy a contar un secreto

tengo vida guardada

la tengo dentro de un sobre y en mi mesilla de noche.

Y yo la guardo como si fuera mi propio tesoro,

que lo es

pero es que es más que eso,

es un tesoro escondido,

es un arma que no hiere ni mata

es un corazón que se hace más grande

es un trozo de vida que no se vende en el mercado de valores

no tiene precio ni nunca lo va a tener.

El sobre lo tengo dentro de una cajita de madera

y porque le gusta sentir su tacto de viejo roble

y sentir su aroma a roble envejecido.

Mi trocito de vida es pequeño

y puede ser un minuto más,

pero tiene su encanto tener un minuto más

y porque a lo mejor en ese minuto más de vida

puedes escribir el más hermoso de los poemas dedicados a la vida.

















PAULINA READI JOFRÉ


 

Terry Pratchett


 "En el interior de cada anciano hay un joven preguntándose qué demonios ha pasado".

ASÍ ES LA VIDA

 







Hoy, al pensar en todo lo que me rodea,
me di cuenta...que en realidad casi todo me altera:
la mínima brisa marina,
cambiar de lugar un objeto que pensaba que apenas me importaba,
la secuencia de las distintas lunas,
los días de poca o intensa lluvia,
y sobre todo,
la distinta fuerza de los vientos,
todo esto...absolutamente todo,
a mí me altera.
No significa que entre en brote esquizofrénico,
ni que vaya a cometer un asesinato,
ni eso, ni nada parecido,
pero yo por dentro noto un desazón ingobernable,
un resquemor insaciable,
una rabia incontinente,
y siento como mi alma se descompone
en pequeños átomos.
Hoy, al pensar en todo lo que me rodea,
me di
cuenta que disfruto con los más mínimos detalles,
disfruto con un saludo de buenos días o de un hasta luego,
disfruto de un café recién hecho o con un simple beso de despedida,
a mí todo esto,
esta suma de ínfimos detalles,
me deja en paz y armonía,
me deja en paz conmigo mismo y con el resto de los mortales.
Hoy, cuando la niebla se despeje,
ya puedo tener una visión global de lo que pasa,
y podré saber lo que pretendo en el día de hoy,
y cual va a ser mi objetivo o mi meta del día,
y también puedo adivinar cuales van a ser mis pesadillas.
Hoy, al cruzar la calle,
por un instante pensé en la vida,
fue un fogonazo bestial,
fue una visión celestial,
fue una premonición alucinante,
fue un mínimo instante de extraordinaria claridad,
y en ese pequeño instante,
pude despejar todas mis incógnitas vitales,
la vida es lo que es,
y no es así, por cuestiones ajenas o divinas,
la vida es lo que es,
porque tú lo has decidido.








LA PALABRA ES SENCILLA


La palabra es sencilla
en cambio el verbo
es difícil y es complicado.
La entrega, la causa
y las ganas de querer
son pulsaciones que laten dentro de cada uno.
Mi terror es la muerte.
Mi esplendor es furtivo y fugitivo.
Mi mente es racional
y muy sensorial y muy intuitiva.
Mi motor es de dos tiempos
uno,
enciende y arranca
y el otro,
persiste en el tiempo
y durará
hasta donde yo quiera que dure
o hasta que me llame la muerte y me diga
¡que pase el siguiente!.













SI TIENES GANAS DE CONOCERME


Si tienes ganas de conocerme y de saber como soy
primero llama a mi puerta
puede que esté o que no
y puede que tenga ganas de conocerte...
puede que sí y puede que no,
yo no siempre apuesto por mí,
tengo días muy malos
y terrores nocturnos que a veces me devoran
y me dejan deshecho por dentro.
Pero, otros días
me siento grande, espléndido
y extraordinariamente sensible
y si la suerte está de nuestro lado
me gustaría conocerte en uno de estos días.













KARMELO C. IRIBARREN

"Lo mejor
es no pensarlo mucho:
seguir andando,
tomar cafés, enamorarse,
ver la lluvia".

SOLEDAD (Miguel de Unamuno)

«Sólo la soledad nos derrite esa espesa capa de pudor que nos aísla a los unos de los otros; sólo en la soledad nos encontramos; y al encontrarnos, encontramos en nosotros a todos nuestros hermanos de soledad. Créeme que la soledad nos une tanto cuanto la sociedad nos separa. Y si no sabemos querernos, es porque no sabemos estar solos.»

CADA DÍA...

 

Cada día
me parezco más a mí.
Lo pienso, yo
lo piensan, mis hijos y mis pocos amigos
lo piensa mi comité de expertos
y hasta lo piensan mis peores enemigos.
Yo no soy de andar sobre aguas sedadas y tranquilas
ni de soñar cosas aparentes y sin importancia,
lo mío se clava y se introduce
como un cuerpo extraño en el ojo ajeno....
mis esquirlas son de plata oxidada
y mis miedos son de frío acero.
Pero tengo grandes alegrías
y risas que contagian
hasta al mayor de los incrédulos.
No sirvo de ejemplo para nada,
soy la antítesis del héroe
y soy tan gallego como africano
y no tengo patria ni bandera
en fin,
soy un apátrida
que salta de un sitio a otro
y que monta su circo
en un descampado
de cualquier ciudad
y por supuesto,
donde me den mejor de comer
y donde me dejen vivir en paz y armonía.













VIVO EN LA UÑA (Lola Andrés)

Vivo en la uña
de la voracidad
enferma
en la costra
de la abyecta
mirada
de la deflagración
y las matanzas.
Amo
me alimento
hago sexo
en el hangar del aire
cada vez más dentro
del aire
más adentro
de la vagina apátrida
dentro
de la pupila jugosa
del pezón.
Mi huerto
sabe a hierba
digerida despacio
mansamente
sin palabra.
Cada vez
más adentro
del poro de la lluvia
de las ingles
fecundas
de la tierra.

















UN VIERNES DEL MES DE MAYO

 

Pues aquí nos encontramos y escribiendo historias con la ventana abierta de par en par. Son las 19,30 horas de un viernes cualquiera del mes de mayo. Por cierto, la mayor parte del día ha estado nublado y se ha despejado a última hora.
Y en esa sucesión vertiginosa en la que nos encontramos (me refiero, al paso del tiempo y de los meses y de los años) pienso que a éstas alturas de la película...todo esto no hay quién lo pare.
El paso del tiempo no lo perdona todo y por eso te lo paga con el envejecimiento y además, cada día que pasa el tiempo está más sordo y se pone más faltón contigo y te llama viejo ante el espejo.
Menos mal que cada estación tiene su propio encanto y nos va dejando su sello y su impronta.
Menos y tengo que decirlo muy claro...menos el puto verano. Porque en el verano sufro como un condenado dentro de una caldera de agua hirviendo.
No soporto los calores soporíferos ni el sudar a chorros. Ni soporto la textura húmeda y pegajosa de la ropa sudada. (Cada uno tiene sus manías y paranoias).
Menos mal que alguien que sabe mucho, un día inventó el aire acondicionado. Y entonces llega el verano y el menda (que soy yo) en cambio de vivir a puertas y ventanas abiertas...simplemente las cierro a cal y canto y entonces de mi cueva ya no salgo hasta llegar octubre.
Pero de momento seguimos disfrutando de la primavera con todo su esplendor:
Flores, fruta, colores y explosiones emocionales...Quizás, demasiadas explosiones emocionales para un viejo como yo.

OCTAVIO PAZ


Todo respira, vive, fluye:
la luz en su temblor,
el ojo en el espacio,
el corazón en su latido,
la noche en su infinito.

EL PUENTE

En este precioso puente de piedra,
aterricé un día con mi nave interestelar
yo venía del espacio
y de casualidad vi este lugar.
Mejor dicho, aterricé al lado...
y sobre una repisa de roca que se mostró amable conmigo.
Ahí mismo,
me dí cuenta que en la Tierra hay tesoros escondidos,
que hay almas que nunca descansan,
que hay gritos ensordecedores,
que hay susurros incontenibles
y que hay miedos que de vez en cuando
se rebotan
como eternos ecos que nunca serán comprendidos.
Pero que ante tanta inusitada belleza,
el miedo, los gritos y los susurros,
se convertirán en gotas de agua
que al final se evaporarán en moléculas...
O puede que todo esto no sea cierto
y en fin, que solo esté diciendo tonterías
y que nada es tan bello ni tan alucinante
y el puente al fin y al cabo,
formaba parte de un cuento
que ha salido de mi cerebro.

EL TEMA ES MUY SENCILLO

El tema es muy sencillo:
Naces y te prestan cuatro ideas que han tenido tus antepasados hace muchos siglos y que han cambiado muy poco.
Poco a poco, las vas haciendo inamovibles y las atornillas en tu cerebro un poco más, si cabe.
Entonces y de nuevo, las incorporas como la esencia pura de tu ideario de andar por casa. Cuatro putas ideas de mierda que las conviertes en cuatro mandamientos que en principio, nadie te va rechistar (o eso, piensas).
Creces, te peleas, te ganas unas cuantas cicatrices y tus cuatro ideas siguen pegadas en tu frente como una verdad de fe inquebrantable.
Estudias lo que sea y mientras mantienes con mimo tus cuatro ideas que cada día van necesitando más agua para que sigan frescas en algún resquicio de tu cerebro.
Te haces adulto, trabajas como un gilipollas y sigues tu ideario como un burro tras la zanahoria de un ideal que en realidad, te has inventado en parte y por otro lado, has adquirido por vía sanguínea.
Algunos, hacen antes la mili y entonces hay que añadir a las cuatro ideas una última idea: te gustará el orden impuesto por la "autoridad" y deberás tener amor a las armas para poder mantener ese orden de imbecilidad y que algunos impresentables, han establecido.
En definitiva y prosigamos. Te empiezas a hacer viejo a los 65 años y entonces miras para atrás y te dices: ¿qué coño he hecho con mi vida?...
Y te respondes sin más:
Pues he hecho el pringado y es más no he aportado nada nuevo a este pequeño mundo tan nuestro y tan dejado de la mano de dios y del olvido.
Y de nuevo piensas:
Mi abuelo tenía las mismas cuatro ideas que yo y yo me encargaré de trasmitir las mismas ideas a mis hijos y a mis cuatro nietos que ahora le están creciendo los dientes de leche y ese un buen momento para dotarlos de mi cuatro ideas fijas.
Y fin de esa puta vida llena de orden, miseria y pureza.
Pero antes de morir, te aseguro que dirás o que pensarás:
Lo mío es lo tradicional,
los toros me entusiasman y porque son fiesta nacional y no se hable más.
los inmigrantes no son seres humanos.
y la patria es nuestra bandera
y ante nuestra bandera, sólo nos queda cantar un himno patrio y visceral
e idolatrar a nuestro rey que ha sido nombrado por la gracia de dios.
En fin, ese señor que he descrito,
no soy yo,
ese señor que he mencionado
ha nacido con cuatro ideas como herencia familiar
y morirá con las mismas cuatro ideas y sin cambiar ni una coma
de su penoso y estrecho discurso.
Al final, va tener razón
el que decía:
"nacimos capados de ideas
e igualmente,
moriremos capados con las mismas ideas".

















ESTAMOS TAN EMBUTIDOS DENTRO DE NUESTROS PROPIOS DISFRACES


Estamos tan embutidos dentro de nuestros propios disfraces
que al final,
creemos que nos hemos transformado en un ser distinto.
Pensamos que no somos los mismos de antes,
que gracias a nuestra puta paciencia
y a nuestro paupérrimo conocimiento
queremos pensar que nos adaptamos a lo nuevo
y que hemos sacado todo el provecho de lo viejo.
Yo soy el mismo que hace 64 años nació con mi cuerpo,
pero ahora soy más viejo o más añoso,
pero el alma
o esa dichosa alma que nos mantiene y nos sustenta
como un armazón cohesionado,
es igual a la de antes y son como dos gotas de agua,
solo que una gota es más reciente o más vieja que la otra.
Ahora tengo un cuerpo más oxidado
y los tornillos van más sueltos,
tengo más cicatrices en el mapa de mi vida,
y millones de historias más
que a lo mejor algún día debía contar.
Pero también,
acumulo muchos más cuentos y batallas
y al final si sumamos o restamos
o multiplicamos y dividimos
el resultado final
es el mismo cuerpo pero más viejo
y un alma, que en mi caso y antes y ahora...
es un alma que no me cabe dentro del
bolsillo.













AMBIGÜEDAD DE LA CATÁSTROFE (Ángel González)

Lo había perdido todo:
amor, familia, bienes, esperanzas.
Y se decía casi sin tristeza:
¿no es hermoso, por fin, vivir sin miedo?

Yo, si viviera en otra tribu

 Yo, si viviera en otra tribu con distinto nombre y con otros apellidos sería el puto amo de mi mundo andaría por las aceras de mi pueblo ve...