
Es evidente,
y es evidente que estoy vivo,
y que también soy un ser humano,
pues tengo dos piernas y dos brazos,
y tengo la cabeza en su sitio,
y por mis ojos, veo,
y por mis oídos, escucho,
y pienso, aunque no lo suficiente,
siempre se puede pensar más,
y ser más incisivo o más cariñoso,
y ser más mordaz o más sensible,
porque yo siento,
y siento como una esponja,
me lleno de sentimientos,
y después me exprimo y quedo vacío,
ya quisiera yo,
ser de otra manera,
ya quisiera yo,
ser menos intuitivo,
porque yo intuyo lo que no quiero ver,
e intuyo,
que podía y debía ser más humano.