El uno le gana al otro
el otro ha perdido pero no se rinde
y por tanto, le pide una revancha
o un duelo a muerte
y para salvar su honor de macho alfa.
Después el uno se carga al otro
y de un certero disparo en medio de su frente,
Ahora, tendrás tres ojos
piensa sonriendo el ganador
mientras el otro tiene un grifo de sangre que le sale a borbotones
y en un último suspiro de vida
es capaz de oír su último gorgoteo de sangre.
Fin de este capítulo
y fin de una pobre alma al que le abandonó su cuerpo
y ya sabéis que un alma sin cuerpo
dura menos que una pila.