Lo mío, es la contundencia, o sea, decir las cosas de una manera aplastante y de que no deje una sombra de duda y porque para dudas está la vida y una sola duda y te dan por culo y si tienes dos, ya no hay solución, la vida te enseñara su lado oscuro y ahí, ya la has cagado. De vez en cuando me veo tan contundente, que añado un puede o un creo y para suavizar la movida, pero en el fondo, se me ve el plumero y se ve que la contundencia es mi tema y mi razón de ser. Podía ser más suave, pero la vida me he ha enseñado que tanta pamplina no se avanza, al revés me ha enseñado que sin cañay métodos coercitivos y contundentes no hay futuro.
Bueno, futuro no lo hay de ninguna de las maneras, porque futuro ¿qué es?. No sé parezco un rapero cantando en las Ramblas y donde todo dios pasando de mi tema. Hablar de futuro es hablar de incertidumbre, es hablar de un poquito del más allá, de que sabemos pero no sabemos, del que puede ser pero así no es o será, de quién sabe, de como será, de que me pica el sobaco y entonces tendré ladillas columpiándose de mis pelos del sobaco o serán simples piojos que rascan mi piel porque tienen necesidad de cariño... no lo sé, el futuro es esa vieja desconocida que te conoce, es esa tarea siempre pèndiente, es esa esperanza ciega que te reclama, es ese grito deseesperado que sale cuando estás operando o intubando y que te dice: cuidado con lo que haces, que si no aciertas te espera el paredón.
Y como metas la pata, no hay futuro y si aciertas, tendrás el futuro de un día para otro y hasta ahí y justamente hasta ahí, llega el préstamo. Nadie te va a decir que has acertado, que has sido verdadero en tus prediciones, que has sido auténtico, pues así es la vida, tú dices y predices y el personal simplemente se olvida. Por tanto que predizca su puta madre y además suena que te cagas lo de que: "NO HAY FUTURO".
Bueno, futuro no lo hay de ninguna de las maneras, porque futuro ¿qué es?. No sé parezco un rapero cantando en las Ramblas y donde todo dios pasando de mi tema. Hablar de futuro es hablar de incertidumbre, es hablar de un poquito del más allá, de que sabemos pero no sabemos, del que puede ser pero así no es o será, de quién sabe, de como será, de que me pica el sobaco y entonces tendré ladillas columpiándose de mis pelos del sobaco o serán simples piojos que rascan mi piel porque tienen necesidad de cariño... no lo sé, el futuro es esa vieja desconocida que te conoce, es esa tarea siempre pèndiente, es esa esperanza ciega que te reclama, es ese grito deseesperado que sale cuando estás operando o intubando y que te dice: cuidado con lo que haces, que si no aciertas te espera el paredón.
Y como metas la pata, no hay futuro y si aciertas, tendrás el futuro de un día para otro y hasta ahí y justamente hasta ahí, llega el préstamo. Nadie te va a decir que has acertado, que has sido verdadero en tus prediciones, que has sido auténtico, pues así es la vida, tú dices y predices y el personal simplemente se olvida. Por tanto que predizca su puta madre y además suena que te cagas lo de que: "NO HAY FUTURO".