HIPÓCRITAS


 

Yo no nací para ser esclavo de nadie


 Yo no nací para ser esclavo de nadie

ni torturándome... pudieron conmigo

ni poniéndome el cañon de una pistola en la sien

ni arrancándome las uñas de cuajo

consiguieron hacerme sumiso a ellos.

Y si quieres dispárame, le dije varias veces

pero hazlo de una vez

y porque por mucho que me torturéis 

nunca saldría de mi boca

que me iba arrodillar ante tí

ni ante nadie

pero los muy cabrones apretaron el gatillo

y lo hicieron varias veces

pero el arma no tenía balas

o para hundirte más en el pánico del miedo

 o bueno, a lo mejor tiene una

y puede que sea la siguiente

y aún resuena dentro de mi cabeza

sus risas de torturadores

y ja, ja, já... 

y este se ha cagado de miedo

mira su cara, mira sus ojos

y mira como tiembla de miedo.



























ESTABA LOCA

 


CHARLES BUKOWSKI


 

LA PUNTA DE UN ICEBERG

 Ahora todo es más difícil los reflejos van pidiendo un descanso los tendones se relajan y contraen menos y peor que antes la vista pide aux...