Y hoy y a pesar de todo, de mis malos augurios y de mis penosos pensamientos, ¡ha salido el sol! y no sé puede rechazar una caricia tan cálida y tan inhumana y con ese cosquilleo tan placentero. Por tanto poco a poco, voy pasando del gris más oscuro al gris claro o al gris roto, porque roto sigo estando pero no tanto y porque el día se va deslizando un poquito mejor. Bueno, ahora me tengo que dar cariño y mimos y caricias y besos y abrazos y al final, puede que me lleve a la cama y porque casi todo acaba en la cama y sino acaba en la cama, acaba en el sofá de tu casa o en el de ella o en el mismo sillón del abuelo y que mejor recuerdo le puedes dar a su memoria, ¡que un polvete humano y pasional!.
Y como se ve, ya estoy entrando en mi salsa, en mi salsa inhumana y desaprensiva y porque el sol y sus rayos incandescentes, me cambian mi estado del ánimo y ahora mismo, estoy pasando del gris roto al azul, al azul y con todos sus tonos, el azul que es mi color preferido y que me tengo que llevar a todos los sitios y el azul siempre va en mi ropa y en mi vista, y azul cielo, azul mar, azul añil, azul metalizado, azul celeste, azul cobre, azul oscuro y claro y es que del azul debieron brotar todo el resto de los colores.
El único azul que no me gusta, es el azul de los muertos y de los sin vida y porque es un azul muerto y es el preludio de la descomposición de los cuerpos. Me gusta el azul vida y con el que se viste la gente y los astros y los mares y de vez en cuando mis ojos y solo de vez en cuando y porque mis ojos son verdes, pero hay días o momentos donde se visten de azul y me encanta ese estado evolutivo y de transformación de los colores y también, porque el azul me encanta y yo todo lo vestiría de azul y con todos su espectro de tonos.
Y como se ve, ya estoy entrando en mi salsa, en mi salsa inhumana y desaprensiva y porque el sol y sus rayos incandescentes, me cambian mi estado del ánimo y ahora mismo, estoy pasando del gris roto al azul, al azul y con todos sus tonos, el azul que es mi color preferido y que me tengo que llevar a todos los sitios y el azul siempre va en mi ropa y en mi vista, y azul cielo, azul mar, azul añil, azul metalizado, azul celeste, azul cobre, azul oscuro y claro y es que del azul debieron brotar todo el resto de los colores.
El único azul que no me gusta, es el azul de los muertos y de los sin vida y porque es un azul muerto y es el preludio de la descomposición de los cuerpos. Me gusta el azul vida y con el que se viste la gente y los astros y los mares y de vez en cuando mis ojos y solo de vez en cuando y porque mis ojos son verdes, pero hay días o momentos donde se visten de azul y me encanta ese estado evolutivo y de transformación de los colores y también, porque el azul me encanta y yo todo lo vestiría de azul y con todos su espectro de tonos.
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