YO ESPERABA MUCHO MÁS DE TI...

De ti ya no espero nada,

 durante un  tiempo esperé algo de ti,

algún movimiento, alguna decisión,

algún hecho que te hiciera valiente,

un paso adelante o dos atrás,

un gesto propicio y desconcertante,

una palabra más alta que la otra,

una mirada de ánimo,

un grito de desespero,

un puño cerrado,

un golpe en la mesa,

un beso en el aire,

pero me equivoqué contigo...

ni eres valiente,

ni corres riesgos innecesarios,

ni asumes tus dudas,

y el final ha sido el que ha sido,

un acto de cobardía y miedo,

una penumbra de dudas,

un desconcierto de sentimientos,

yo esperaba mucho más de ti...

te creía fuerte y poderosa,

me parecías una Diosa del Olimpo,

toda guapa, toda brillante,

toda potencia amorosa

y creí en ti y hasta la Médula,

ahora creo que en realidad,

me enamoré de un fantasma,

le puse carne y huesos

y un Alma que no sé merecía,

le sobraba Alma, 

le desbordaba por las costuras, 

y un día, le reventó de amor,

o eso creo yo,

porque a nadie le gusta reconocer

que a lo mejor el problema es...

que ese fantasma con nombre de mujer, nunca me ha querido.