MIRA...MIRA...NI UN REPROCHE

Mira...mira...ni un reproche,

lo mío no es un único y solitario reproche

pues lo mío... son millones y millones de reproches,

todos acumulados, todos pendientes, todos con ganas de sangre,

todos con sed de venganza y hambre de Gigante...

yo digo, yo opino

e insisto... yo digo, yo opino y mantengo lo que digo,

y si te parece mal...pues ¡te jodes!

no son tiempos de ir templando Gaitas 

ni de andar con paños calientes,

son tiempos de curar las heridas como se pueda

y de que cicatricen por primera intención

y que no dejen rastro ni huella..."restitución ad integrum",

son tiempos de salvar los muebles de la quema,

pero ahora no te preocupes por mí,

los míos los salvo Yo

y los tuyos, que los salve Dios... si quiere,

lo último que me preocupa a mi es tu salvación,

sabes...en la vida hay momentos,

momentos que si los dejas pasar no volverán a ser vistos,

son trenes que pasan sin rumbo fijo,

pero con un destino final bien señalado que dice:

destino final...una historia de amor interminable,

y eso es lo que te has perdido

y eso es lo que te vas a perder para siempre...

tendrás otras historias porque yo no te veo sin nada,

pero la inmensidad de la nuestra me temo y sé que desapareció para siempre.

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JULIO CORTÁZAR