Ojalá estuvieras aquí...
ojalá estuvieras aquí...
tengo la Chimenea encendida,
en el aire flota el olor a Mandarina (la que me acabo de comer)
cerca de mi hay una hermosa Orquídea blanca,
y yo estoy sentado y al mando de la Nave,
(manejo sus instrumentos y mandos)
y a mis pies hay una caja de madera llena de folios escritos
el ambiente es cálido y muy humano,
estamos mi hijo pequeño y yo,
cada uno anda a sus cosas
pero los dos sabemos que si hace falta seremos dos en uno,
hay esa especie de confianza que nos da seguridad,
de todas formas y dada la tranquilidad en el medio ambiente,
nos podemos permitir el lujo de seguir cada uno a lo suyo,
mi hijo sabe que yo le quiero con toda mi Alma
y yo sé que él me adora...
y solo me queda por repetir mi mantra de hoy:
¡Ojalá estuvieras aquí!
ojalá estuvieras aquí...
tengo la Chimenea encendida,
en el aire flota el olor a Mandarina (la que me acabo de comer)
cerca de mi hay una hermosa Orquídea blanca,
y yo estoy sentado y al mando de la Nave,
(manejo sus instrumentos y mandos)
y a mis pies hay una caja de madera llena de folios escritos
el ambiente es cálido y muy humano,
estamos mi hijo pequeño y yo,
cada uno anda a sus cosas
pero los dos sabemos que si hace falta seremos dos en uno,
hay esa especie de confianza que nos da seguridad,
de todas formas y dada la tranquilidad en el medio ambiente,
nos podemos permitir el lujo de seguir cada uno a lo suyo,
mi hijo sabe que yo le quiero con toda mi Alma
y yo sé que él me adora...
y solo me queda por repetir mi mantra de hoy:
¡Ojalá estuvieras aquí!
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