24 de Marzo, Domingo
tarde sosegada y como corresponde a un
Domingo de tarde,
tarde muy propia y de auténtica cepa,
tarde tranquila y amable,
para el decir de algunos, un tanto aburrida,
la frontera entre lo tranquilo y lo aburrido
no siempre es y ha sido nítida
a veces aparece difuminada en medio de la bruma marina,
aunque precisamente el día de hoy es de una claridad apabullante,
y como se dice na miña terra Galega:
"fai un sol de carallo"
y el azul del mar es el espejo del azul del cielo,
es un puto espejismo a lo crudo
y en el medio de ese espejismo se encuentra la Isla de Menorca
y como si fuera la bisagra de las dos puertas azules e iguales,
y si rascamos un poco más,
aparezco Yo escribiendo en un rincón de mi casa
y manejando los mandos que conducen mi nave,
que por ser Domingo la tengo a repostar
y dejaré para mañana el empezar mi nuevo viaje interestelar,
hoy escojo destino y planifico el camino,
mañana pondré mis conocimientos en práctica
y seguramente pasado, estaré en mi objetivo,
pero de momento mi observación en el día de hoy,
se puede resumir en unas cuantas palabras:
"fai un sol de carallo"
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