En éste país de "mierda" tenemos una izquierda maloliente y como corresponde al que remueve en la basura. ¡Faltaría más!. Divididos es poco, pero es que somos cuatro y cuatro nos dividimos por otros cuatro y entonces, quedamos uno en ocho porciones. Pero claro, ellos siguen y siguen y a ver quién coño es el más puro del basurero y como si ya no supiéramos lo que son las purezas de los puros...que si anticapitalistas pero los más del mundo, que si apoyamos a Venezuela y porque siempre hay un ciego que no ve más de sus narices (como si apoyar al payaso de Maduro fuera lo más consecuente de una izquierda penosa y triste). Lo cual por cierto, no nos lleva a tener que apoyar al imperialismo yanqui y porque el mundo y la vida, no son las dos caras del mismo disco y por un lado tenemos al bueno y por el otro, al malvado, malo y perverso, porque para eso están los matices y las pequeñas cosas que a su vez, pueden hacer que nuestra vida pueda ser mucho mejor en el día a día (aunque para el decir de algunos, siempre será peor)...porque ésta izquierda lleva el pesimismo encima y adora la negrura de la vida...España va mal y va muy mal y peor que todos los países que nos rodean y porque ellos luchan y luchan todo el día y en cambio nosotros nos dedicamos a dormir la siesta.Pero claro, algunos se ponen el apellido de "Unidos o Unidas" y ya está y ya están unidas para siempre, pero en la práctica se cagan en todos los demás, en la existencia de los otros, en su poca pureza de izquierdas, en que ellos son los verdaderos guardianes de la ideología de izquierda. Y sinceramente es poco castigo el que van a llevar, porque en éstas elecciones se van a comer los mocos...y lo más triste de todo,...es que no fue ni será por su culpa, porque para eso están los demás y entonces para unos la culpa será de Podemos, para otros será de Izquierda Unida, para algunos otros será de Errejón o del Psoe o de la madre que los parió...pero de ellos nunca será. Claro que después están los independientes de izquierda, como Yo, que también recibiremos nuestra parte del pastel. Vamos que por no ser militantes ciegos de la causa soviética o cubana o sandinista nos caerá el infierno encima. Como si Putin fuera comunista de los bosques...como si Cuba fuera libre y libres sus habitantes, como si a Venezuela no lo dirigiera un impresentable llamado Maduro (os acordáis del pajarito de Maduro, el que se le apareció en forma de Hugo Chávez, pues si no os acordáis, yo os lo recuerdo).
Y ahora vendrán las elecciones y entonces volverán los espíritus más puros a galopar como caballos desbocados. Seremos la unidad de izquierda más desunida de la tierra. Ahora bien, avisados están y bien avisados...pero creo y estoy convencido de ello, que por mucho que se les avise les va a dar igual y al final, morirán con las botas puestas, pero eso sí puros e inmaculados...
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