que no,
yo no te pido respuestas a cielo
abierto,
yo te las pido de tú a tú,
de cara a cara,
de frente y sin pestañeos,
y...y...y eso sí, caben las dudas,
las dudas siempre caben
y caben los versos sueltos,
los versos que hablan del viento y de las nubes,
los versos que atraviesan sueños y los hacen mejores,
los versos a la luz de la Luna
que hablen de nuestro pequeño gran amor,
que hablen de esa fruta prohibida
de esa cercanía tan lúcida estando tan lejos,
de esa melancolía que me entra al recordar tus huesos,
hablemos de eso,
hablemos de lo nuestro,
de como se aproximaban nuestros cuerpos,
de como temblaban,
de como morían y de como después, resucitaban,
sí, hablemos de lo que nunca pudimos hablar,
de lo nuestro y de todo lo que nos perdimos...

No hay comentarios:
Publicar un comentario