Resulta que hoy la Luna está casi llena,
yo la veo llena y quizá y afinando mucho más mis viejas pupilas,
puedo ver una diminuta deformidad en uno de los lados
y entré en internet (y para saciar del todo mi curiosidad malsana)
y me dice que la fase lunar del día 22 de Octubre es la siguiente:
Luna gibosa creciente y con una luminosidad del 91,9%
o sea, que casi está llena y le falta entre un 8 y un 9% para estar
hasta los topes
y lo de luna gibosa creciente tiene su coña marinera,
gibosa viene de chepa o chepa viene de gibosa
en éste caso el orden no altera el producto,
prosigamos...
gibosa y creciente o sea que crece y va a más
y al final la chepa acabará cerrando el círculo lunático
y mañana o pasado
(no sé que ritmo en concreto tiene de crecimiento)
todo se cubrirá de maravillosa luz de luna
y nos inundará de claridad alucinante y apabullante,
y si ya hoy, alumbra de forma descarada y sin ningún pudor,
y porque hace un rato me asomé a la terraza
y porque me apetecía mirarla a la cara
y así pude comprobar su excelsa luminaria de astro,
nubes y luna,
estrellas y luna,
mar mediterráneo y luna,
hoy se nos presenta la luna con su traje de gala,
lleva antifaz y sombrero de ala ancha
y muestra una de sus encantadoras sonrisas.
Hoy la Luna ha llamado a mi puerta
y con uno de sus dedos me ha señalado al cielo,
yo le sigo con mi mirada
y descubro que al final, la luna se ha quitado el sombrero
y a pesar de esa distancia tan sideral y tan anacrónica,
observo que me saluda con destellos de oro y plata...
pues nada mi querida luna, solo te digo que...
que ¡¡¡hasta mañana!!!

No hay comentarios:
Publicar un comentario