Y por eso yo sigo aquí.


 De tanto temblar

parezco un volcán.

De tanto hablar

soy como un libro abierto.

De tanto pensar

las ideas se me caen como fruta madura.

De tanto decir quien soy,

estoy en boca de todos

y no son halagos lo que dicen de mí,

son palabras hirientes

que me atraviesan como balas.

Pero matar no me matan

me hieren, me hacen sangrar

y me dejan exhausto,

pero revivo.

Y por eso

yo sigo aquí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

JULIO CORTÁZAR