NO PUEDO DEJAR DE PENSAR EN TÍ

 

No puedo dejar de pensar en ti,
en tu cara, en tus ojos,
en tus labios, en tus pestañas,
en tus pechos, en tu pelo,
y en tu mirada rebosante de vida,
y todo, y todo lo llevo dentro de mi,
y lo llevo, en el almacén de mis sentimientos.
Si pienso en ti,
a veces me pierdo,
pues no me encuentro a gusto,
me produce un resquemor o una inquietud alucinante,
o una corriente eléctrica que me atraviesa de los pies a la cabeza.
No puedo dejar de pensar en ti,
no puedo, por mucho que quiero,
es como un tumor dentro de mi cabeza,
o como una obsesión maldita y maldecida,
y si me lo extirpo, me duele,
y si no lo hago, me escuece,
entonces, ¿que hago?,
si no puedo dejar de pensar en ti,
aunque me ponga del revés,
y me retuerza como una serpiente de cascabel,
la idea sigue persistiendo en mí,
está dentro de mi esencia,
y está clavada en el centro de mi alma,
y escuece, duele y sangra,
y eso me produce,
convulsiones neuronales.
No puedo dejar de pensar en ti,
pero sí puedo pensar en otras cosas,
puedo sentir un paisaje de una montaña,
o ver como desciende un río,
o notar como las olas me mecen,
o como la luna me enternece,
es que puedo sentir tantas cosas...
que a veces se me olvida,
que no puedo dejar de pensar en ti.
















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JULIO CORTÁZAR