EL GRAN MOMENTO

Bueno hoy es día 30 de Diciembre y ya estamos en la previa de Champions, pues mañana es la final o el final del año. No sé si miro hacia atrás y veo el anterior fin de año, hay cambios, habelos hainos, pero quizá no tantos. Lo que es alrededor la cosa está igual y quizá peor y por muchas campanas que suenen a mejoría económica y que como siempre, lo dicen los mismos que sacan tajada en cualquier circunstancia y ahora después de jodernos los derechos laborales y empobrecer más a los pobres, ellos empiezan a notar que sus bolsillos se llenan más y de ahí, dicen y concluyen que esto empieza a repuntar.

Personalmente, pienso que ha pasado 1 año y yo me encuentro más cansado y harto. Tengo la sensación de que nos han roto por dentro y que han destrozado nuestras conciencias y de ahí viene que seamos perros que ladran pero que ya no muerden. Por lo menos es la sensación que yo tengo y el poder se ha dado cuenta de que somos muñecos de trapo y nosotros hemos aceptado ese papel sin poner muchas trabas.

 Por decirlo de otra manera, ahora somos más sumisos y obedientes y todo porque tenemos miedo. Nos han metido el miedo en la médula y temblamos por si nos bajan más el sueldo, temblamos por si nos echan, temblamos si hablamos demasiado y nos pasamos el día temblando. Puede que esto suene a catastrofista y puede que yo esté escorado hacia ese lado, por tanto puede que yo peque de pesimismo, pero si no tengo toda la razón, creo tenerla en bastante porcentaje. No hemos perdido el partido por goleada, pero si nos han metido unos cuantos goles.

Y lo peor de todo esto, es que yo no veo los tallos verdes, ni veo la luz del final del túnel, yo no veo nada. Aunque históricamente ya se sabe lo que pasa, que hay todas las condiciones para que esto explote y no pasa nada y de repente salta una chispa cualquiera, una chispa sin importancia y se arma la marimorena. ¡Ojalá esta teoría sea cierta!. Así que yo sigo a la espera y en mi casa tengo preparado mi uniforme de guerrillero y espero ansioso a que por fin llegue el momento, el momento de darle la vuelta a todo. ¿Y porqué no puede ser éste fin de año?, pero yo lo dudo y por tanto seguiré esperando ese gran momento. Y habrá quién me diga, que ya puedo esperar sentado, pues no se equivoca para nada, aquí estoy sentado, pero escribiendo lo mejor que puedo.