Bueno pues ya es Martes y día 14 de Enero y el día aquí está bueno, claro y con sol invernal y con una brisa fresca y fría, día ideal invernal. Cuando el sol se acueste ya será otra cosa y aquí se acuesta pronto, a las 5 de la tarde ya está en cama o sea que sobre las 6 de la tarde ya tendré la caldera encendida. No hay muchas noticias nuevas hoy, quizá la más destacable es que hoy fui al médico, al médico de cabecera. Nada que como el Rey me voy hacer la ITV de mi cuerpo o carcasa y ya se sabe, hay renovar y cambiar algunas piezas, engrasar otras y como nuevo.Hacía tiempo que no iba a un médico de cabecera, ya se sabe en casa del herrero cuchara de palo. Pero tuve buenas sensaciones con mi compañero médico y me encantó sentirme cuidado, o sea dejarme auscultar, tomar la tensión y demás historias y sin ser yo el que realiza las pruebas, ni tener que pensar en sus resultados. Debe ser que hoy tengo ganas de mimos. Puede ser y es más, aseguro que es. En principio no tengo ganas de escritos guerreros, más bien hoy tiro por lo íntimo (eso digo a veces al principio, después se me hincha la vena y ya me pierdo).
No sé, pero ahora me vino a la cabeza una felicitación de fin de año que hizo el impresentable del Maradona. En la cual se levanta la camiseta y enseña su barriga y dice algo así: "Esto que veis no es montaje de photoshop, ni es una mentira y felicito a todos los marodianos y al resto, que la chupen". Bueno pues al tío se le ve delgado o normal y no en el estado de vaca sagrada que tenía anteriormente, aunque hay que aclarar que tiene un balón intragástrico y supongo que más cosas.Que la chupen dice el tío y el dios Maradona nos recomienda una dieta y un tratamiento, ¡chuparla!. Qué bonito, qué bonito, que didáctico y ejemplar eres querido Maradona. No sé si quieres decir que tu te conservas de esa forma porque es el tratamiento que seguiste y sigues o es que en realidad eres un descerebrado y producto de tanta raya esnifada.
Pero una vez más lo has demostrado, el que eres un dios venido a menos o un decadente que un día fue alguien, bueno que fue alguien jugando a la pelotita. Que la chupen dice el tío y a eso que le vas a contestar, pues nada. Porque las cosas llevadas a ese extremo, no tienen contestación, sólo cabe la compasión. Pobre tío descerebrado de mierda, que pena me das. El tío está tan acostumbrado a estar en el altar, que cuando siente o nota que el no es centro del Universo, tiene que hacer éste tipo de declaraciones, y ¡ale! ya está de nuevo de foco de atención. Pues sabes qué Maradona, yo la chupo muchas veces y cuando me da la real gana, pero a ti juro y lo juro por mis muertos, que no te la chuparé nunca.
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