¡¡¡TIERRA FIRME!!!

Éste es el precioso muelle de mi pueblo
Y porque no y porque hoy no me voy a bailar un tango, que no sé como se baila pero sé que me encanta. Y me voy al pequeño puerto de éste pueblo, ese puerto tan coqueto y entrañable y ¡tan mediterráneo! y espero que venga la noche, que ya no queda mucho y me pongo debajo de la farola que tenga más encanto y ¡hala! a bailarse un tangassso. Un tangassso por soleares y un tango que infunda un poco de sangre a éste pueblo medio muerto. Por cierto que también se ha ido a pique el único sitio o bar o pub o como se llame, donde se hacía cante jondo.

Bueno tanto como jondo no, pero si era un sitio donde iban sobre todo los menorquines, e iban a cantar sus penas y con esa alegría que tanto les caracteriza. Pues nada también se fue al carajo y no debía pasar nada, pero si pasa. Porque si los menorquines allí lloraban, se explallaban y de alguna manera se consolaban mutuamente, pues ahora, ¿donde lo harán?. Pues nada lo harán en cada esquina de la puta calle o en el supermercado o en la Plaza del Pueblo. Y si ya el ambiente hasta ahora era de cementerio, pues a partir de ahora va a ser ambiente  de funeral perpetuo.

Éste pueblo tenía algo distinto, pues es un pueblo Isleño como todos los de ésta  Isla, pero tenía una parte importante de su población que era andaluza. Y con la puta crisis, se fue gran parte de ésta gente y los que aún quedan, están a dos velas. Y ya se sabe que sin pelas la alegría no fluye o no fluye tan fácilmente. Pues éste sector de población le daba alegría al pueblo, ya sabéis, chistes fáciles y ole y ole y ole. Pero ahora ni ole ni hostias benditas, ahora el silencio es el idioma más hablado.

Ésto es el puerto de Ciutadella
También hay muchos guiris, alrededor de 700 y teniendo en cuenta que la población de Es Castell ronda los 7.000 habitantes, pues nada que es un buen pellizco, es el 10% del total. Pero los guiris son los guiris y tienen sus propios chiringuitos y su alegría no es mucha, son guiris ingleses y blanquitos como la nieve, y su alegría es otra, que traducida al castellano, es alegría que se mide según baje el contenido de la botella. Y esa alegría es difícil de traducir, pues ellos solo hablan inglés e inglés del Imperio y además con esa dificultad del habla que produce el exceso de Gin. Hablan en "Papeo", que es un inglés en el que no se entiende ni Papa. Pero ellos siguen en pie, bueno siempre apoyados en algo y supongo que sus conversaciones irán de: "de tío, ¿como te va el Hígado?, lo tienes cirrótico o ya le queda poco".

O sea que entre unos y otros, ya veis como está el percal. Está como para echar cohetes. ¡¡Ay¡¡ como echo de menos mis otros feudos o tierras, la Galicia tierna y verde y sembrada de temporales y mi Cádiz del alma con su luz viva y cálida. Pero bueno eso no me pasa siempre, solo me entra la morriña de vez en cuando. Pero cuando la morriña me impregna, me dan ganas de ponerle a ésta Isla un par de remos y llevarla a buen puerto o sea hasta Tierra o Península. Y ni mar ni nada, ¡YO QUIERO TIERRA FIRME!.

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JULIO CORTÁZAR