Gracias vida mía,gracias por darme tanto,
por quererme, por amarme,
por ser siempre mi fiel acompañante,
y desde que me diste tú mano,
y desde que me iluminaste,
yo jamás he renegado,
y tú eres mi vida
y yo soy tú esclavo,
y tú eres la sabia del árbol
y yo las ramas que crecen,
pero ahora, vida mía,
yo estoy estancado,
ni crezco, ni decrezco,
simplemente vivo del árbol
y vida mía déjame ser tú parásito,
vida dame vida,
y
vida dame tú mano.
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