El día avanza y menos mal que avanza y porque yo me quedado traspuesto a las 2 de la tarde y ¡atontado de mierda!, ahora son las 6 de la tarde y el problema que tengo de verdad, es que no se como llenar los espacios del tiempo, es decir, no sé como llenar las horas con contenido. Y puede y solo puede, que hoy no esté para escribir y porque tengo una especie de ansia que me come o me carcome por mis adentros y entonces a la mínima se me va de mi chaveta y el alma también se me va detrás. Y no es que tenga carencia de ideas, al revés, las ideas brotan como manantiales desbordados, pero me falta ese punto y que se llama, seguir la idea inicial. Es decir, voy botando de idea en idea y cuando empiezo a adentrarme en una, ya estoy pensando en la otra.
Tampoco pasa nada y como dicen algunos, hoy tendré un día disperso. Y es que hay días que son así y porque me puede el ansia y las ganas de comerme la vida y bueno, también tengo ganas de comerme otras cosas, pero no pienso ponerme en plan guarrete de viejo salido. Porque a mi lo que realmente me puede es el amor y ahí, si que estoy jodido y bien jodido y ahí, me pongo asquerosamente blandengue o blandito y que no sé que es peor, si ponerme blandito de grimoso o blandengue de merengue. Y hoy ante todo, estamos en un día de amor y por eso salen los coranzitos estallando de amor.
Pues lo dicho al principio, el día avanza y yo me quedé a las 2 de la tarde y eso que no comí empanada de berberechos, que es la empanada más famosa y glamurosa de mi tierra gallega, bueno no, también está la empanada de xoubiñas, que son pequeñas sardinas que se comen con espinas. y es que hoy comí sepia con arroz negro y feita por mín y por mis manos. Y quietos y que nadie piense que soy un cocinitas y porque no lo soy y porque sino tampoco pasaría nada, pero como no lo soy y cocino porque tengo que cocinar y ¡qué remedio!, me jode que se me confunda con un Master Chef de la vida y porque eso marca y después la gente te envía correos con recetas y consejos de como se debe cocinar mejor.
Tampoco pasa nada y como dicen algunos, hoy tendré un día disperso. Y es que hay días que son así y porque me puede el ansia y las ganas de comerme la vida y bueno, también tengo ganas de comerme otras cosas, pero no pienso ponerme en plan guarrete de viejo salido. Porque a mi lo que realmente me puede es el amor y ahí, si que estoy jodido y bien jodido y ahí, me pongo asquerosamente blandengue o blandito y que no sé que es peor, si ponerme blandito de grimoso o blandengue de merengue. Y hoy ante todo, estamos en un día de amor y por eso salen los coranzitos estallando de amor.
Pues lo dicho al principio, el día avanza y yo me quedé a las 2 de la tarde y eso que no comí empanada de berberechos, que es la empanada más famosa y glamurosa de mi tierra gallega, bueno no, también está la empanada de xoubiñas, que son pequeñas sardinas que se comen con espinas. y es que hoy comí sepia con arroz negro y feita por mín y por mis manos. Y quietos y que nadie piense que soy un cocinitas y porque no lo soy y porque sino tampoco pasaría nada, pero como no lo soy y cocino porque tengo que cocinar y ¡qué remedio!, me jode que se me confunda con un Master Chef de la vida y porque eso marca y después la gente te envía correos con recetas y consejos de como se debe cocinar mejor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario