RECLAMAR LO QUE NO TIENE SENTIDO

Pues sí señor, el mundo ahí fuera sigue su puto ritmo y que no tiene porque coincidir con el tuyo, el tuyo y en mi caso, es bestial y es que no tiene nada que ver lo divino con lo humano, aunque tampoco es que vaya de divino por la vida, pero es una forma de explicarlo y nada más que eso. Digamos que lo mío, está dotado de magia, de puta magia que saco de mi bolsillo mágico y un minuto de los míos no tiene nada que ver con un minuto de tiempo. Pero bueno, lo normal y lo que me suele pasar es que un minuto de los míos, se convierta en un segundo de tiempo real y por eso siempre estoy reclamando tiempo y más tiempo y más vida y más años y más historias.

Yo reclamo y aunque nadie me escuche, ni me haga puto caso, es mi deber como persona social o sociable reclamar lo que para muchos carece de sentido, pero no para mí y porque al final, al sinsentido siempre le encuentro un sentido y lo que hoy parece deforme y sin forma, mañana puede adquirir un preciosa forma. El sinsentido es una forma transitoria que con el paso del tiempo va adoptando otras formas y en esa puta evolución nos movemos y por eso, lo que hoy parece un puto estorbo, mañana ya no lo es. Hay que ir guardando cosas inútiles, cosas que sientes pero que no eres capaz de interpretar y porque te faltan datos y números.

Pero ¡coño!, resulta que llega un día en se te abren las entendederas y empiezas a entender muchas cosas que antes no comprendías. Y que nadie me diga que eso es ciencia y me refiero a ciencia exacta y porque no lo es, es decir, tiene algo de ciencia, pues es verdad que tienes más datos, pero también lo es, que a veces se te abren tus compuertas con la mínima tontería y puede ser que un olor te despierte o un tacto o un sonido y de repente te viene todo un aluvión de claridad encima. La ciencia, vale, pero la no ciencia, también y porque el pensamiento humano tiene mucho de terminaciones neuronales, pero también tiene todo un mundo de ideas, que nadie sabe como funcionan y porque un día inundan tu cabeza y en otro, escasean. Y buscas y rebuscas razones y cuando no las encuentras, recurres a cosas subjetivos, como el que hoy has dormido mal o que los sueños te dejaron resaca o a que las astros no se alinearon como tocaba.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

JULIO CORTÁZAR