ÚNICA EVIDENCIA

Mi ría de Vigo
¡Buenos días! y ahora ya tengo la clave de lo que por desgracia va a pasar muchas veces éste Verano, mejor dicho sé lo que va a pasar muchas veces y eso no es tener la puta clave de nada y lo sé, por repetición de situaciones y que puedo resumir en esto: Guardia de 24 horas, por el día entretenido de trabajo y por la noche sin pegar ojo y yo hablo del días siguiente, de ese día en que uno anda arrastrado sin tener que currar, pero tu cara denota el cansancio y ante las repetidas preguntas de la gente te hartas de repetir..., es que hoy estoy saliente de guardia y con eso llega y con eso debía ser suficiente. Bueno, hay los que lo saben, pero que de alguna manera te tienen que decir, mira yo ¡que fresco y reluciente estoy!, porque su tema consiste en eso, en joder al que se siente débil y en reírse delante de su cara. Y ojalá ahora me encontrara a uno de estos especímenes, porque ahora ya estoy recuperado y estoy en plenas condiciones físicas y mentales y si me encontrara a un payaso de estos, no sé...no sé si me merece la pena ensuciar mis manos con sangre ajena.

Ayer me pasé el día vegetando, casi no hablaba, casi no sentía y todo se hubiera arreglado con un sueño conciliador y reparador, pero a veces pasa que no hay posibles pactos con el sueño y hasta con la llegada de la noche me costó dormir un huevo. Son desarreglos del sueño, que no de los sueños, los sueños los puedes tener igual si no duermes. Total, creo que nos pasamos un tercio de nuestras vidas durmiendo o sea, yo tengo 61 años y me he pasado durmiendo más de 20 años y así, suena como demasiado fuerte y contundente, pero así es la vida de dura. Y claro esto va dentro del paquete, pues no te van a devolver los años dormidos, ni te dejan hipotecar los que en teoría te faltan por dormir. Por ejemplo, yo si yo quisiera hacer el esfuerzo de no dormir más, me tendrían que conceder que no me cansaría nunca y eso, no va a ser así.

Bueno, pues si dormimos un tercio de nuestras vidas y la pregunta delo millón es ¿Y para qué?. Dicen que para reparar células, para que descansen y también dicen que es necesario para sedimentar nuestros recuerdos o sea, lo ves, lo sientes, lo guardas y lo almacenas y para que se asiente necesita un tiempo de pausado reposo. Aunque también esto tiene sus detractores e intentan demostrarnos que durante el sueño hay una gran actividad celular y neuronal y que dentro de nosotros no descansa ni dios bendito. De momento, todo son suposiciones y la única evidencia cierta, es que si no duermes bien y como toca, al día siguiente eres un puto zombi...

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JULIO CORTÁZAR