No sé...pasan los días y con ellos pasa la vida y en teoría nos queda menos para abrazar la muerte y claro, un día 1 de Noviembre todo acaba en muerte. Es curioso cuando te envuelve la tristeza sin saber porqué...quizá porque sea gratis y además, es muy fácil de aplicar y te pones en modo triste y ya está. Hoy está nublado y cuando hace éste tiempo mis sensibilidades que son muy sensibles, se ponen más a flor de piel que nunca, pero eso sí ni una puta lágrima derramado. Sigo seco de lágrimas y mira que tengo motivos y motivos para llorar un mar de lágrimas, pero cuando lo intento frunzo el ceño y espero que una lágrima salga de mi glándula lacrimal y no sé...debe ser que sale un pedito en forma de lágrima. Y tuve una época de mi vida que andaba con la lágrima fácil, quizá demasiado facilona y a la mínima estaba llorando y a moco tendido. Son épocas, son distintas épocas y además, yo ahora con los años padezco de sequedad de mucosas y como se dice, amanezco con legañas por exceso de sequedad ocular y no porque no me lave tal y como estará pensando alguno.
Y es curioso, porque cuando me daba por llorar por cualquier cosa lo podía utilizar más fácilmente. Es decir, lloraba a moco tendida y podía dar pena y lástima y eso mismo te quitaba algunos años de condena, porque te acolchaba las hostias y te amortiguaba los golpes...En cambio ahora y aunque ponga pucheros y me mate hacer jipidos, la pertinaz sequía de lágrimas que padezco, no me sirve de eximente y las condenas son enteras y las hostias también. Ahora no doy pena, ni lástima y hasta la otra persona me ve con cara de la mala hostia y porque piensa que estoy de cuento teatrero o que estoy haciendo el imbécil. ¡Joder! el poder que tienen las lágrimas...
Y una sola lágrima es más eficaz que mil palabras o que un buen mogollón de gestos y es que las lágrimas y las penitas están superunidas y hasta estoy convencido de esto: no se puede dar pena ni lástima, sin derramamiento de lágrimas y es que las lágrimas son el caldo de cultivo de las penas y allí se crean, se forman, se multiplican y hasta salen en fila india. Por eso yo no doy ni pena, ni lástima y aunque describas mis penas haciendo el pino...pero bueno y como dicen los mentores de las penas...yo sé lo que sufro y lloro y el dolor lo llevo yo y sobre mi alma y cuerpo...

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