Domingo y día 11 del 11 del 2018,
el día de la lotería de la Once,
que yo nunca compro,
salvo la del bar donde voy a desayunar
y por razones obvias y evidentes,
pero un día del mes de Octubre me dije:
voy a comprar un número de Lotería
y me encontré de bruces con el de la Once,
que por supuesto, es para hoy, día 11 del 11,
y quién sabe a lo mejor hoy no me veis más el pelo,
porque lo tengo muy claro,
en el caso de que me hiciera millonario,
pues pondría a otro a escribir tantas tonterías como las que escribo
,
como se llama: "un negro literario" que tienes cojones el nombre,
negro, esclavo y mal pagado y ya tenemos la definición de un "negro literario",
pero vamos a ver una cosa...
yo soy ateo y agnóstico en casi todo,
es decir, no creo en Dios ni en sus patrañas,
pero tampoco creo en las bondades de la suerte,
bueno a pequeñas mordidas, si creo,
(porque son muchas más y alguien le tiene que tocar)
pero en quinielas, loterías, euromillones y no me toques los cojones,
lo siento, pero...soy agnóstico y ateo al cien por cien,
pero volvamos al si me tocara...¿que haría?
¿un coche a todo lujo?...coche ya tengo y no es de lujo,
pero para mí sí lo es,
¿un Yate?...hace mucho tiempo que he pasado de los Yates
y por dos cosas:
porque me mareo en altamar
y porque lo que me gusta a mi es ir a pescar
y para pescar no necesito un Yate de alta gama y a todo trapo,
¿un inmenso chalet con grifería de oro?,
pues tampoco, primero porque paso de los grifos de oro
y segundo, porque me sobraría espacio por todos lados,
me conformaría, con un chalet pequeñito,
eso sí, con maravillosas vistas al mar o a la montaña,
en definitiva, si yo estuviera sobrado de pasta,
sería igual que lo soy ahora sólo que más rico,
¡hombre! y algunos lujos me permitiría...
de vez en cuando cogería un avión privado,
en otras, las mejores suites con los mejores baños,
pondría una piscina climatizada en mi casa
y por supuesto, que pudiera volver a mi deporte favorito,
el Padel y con pasta y no hay mejores argumentos,
el mejor cirujano del mundo estaría a mi disposición
y venga a conectar las viejas Arterias de mis pobres Piernas,
y entonces la Claudicación intermitente que padezco,
sería una anécdota más que una vez ocurrió en mi vida,
sería un cuento más para poder contar a mis Nietos.
el día de la lotería de la Once,
que yo nunca compro,
salvo la del bar donde voy a desayunar
y por razones obvias y evidentes,
pero un día del mes de Octubre me dije:
voy a comprar un número de Lotería
y me encontré de bruces con el de la Once,
que por supuesto, es para hoy, día 11 del 11,
y quién sabe a lo mejor hoy no me veis más el pelo,
porque lo tengo muy claro,
en el caso de que me hiciera millonario,
pues pondría a otro a escribir tantas tonterías como las que escribo
,
como se llama: "un negro literario" que tienes cojones el nombre,
negro, esclavo y mal pagado y ya tenemos la definición de un "negro literario",
pero vamos a ver una cosa...
yo soy ateo y agnóstico en casi todo,
es decir, no creo en Dios ni en sus patrañas,
pero tampoco creo en las bondades de la suerte,
bueno a pequeñas mordidas, si creo,
(porque son muchas más y alguien le tiene que tocar)
pero en quinielas, loterías, euromillones y no me toques los cojones,
lo siento, pero...soy agnóstico y ateo al cien por cien,
pero volvamos al si me tocara...¿que haría?
¿un coche a todo lujo?...coche ya tengo y no es de lujo,
pero para mí sí lo es,
¿un Yate?...hace mucho tiempo que he pasado de los Yates
y por dos cosas:
porque me mareo en altamar
y porque lo que me gusta a mi es ir a pescar
y para pescar no necesito un Yate de alta gama y a todo trapo,
¿un inmenso chalet con grifería de oro?,
pues tampoco, primero porque paso de los grifos de oro
y segundo, porque me sobraría espacio por todos lados,
me conformaría, con un chalet pequeñito,
eso sí, con maravillosas vistas al mar o a la montaña,
en definitiva, si yo estuviera sobrado de pasta,
sería igual que lo soy ahora sólo que más rico,
¡hombre! y algunos lujos me permitiría...
de vez en cuando cogería un avión privado,
en otras, las mejores suites con los mejores baños,
pondría una piscina climatizada en mi casa
y por supuesto, que pudiera volver a mi deporte favorito,
el Padel y con pasta y no hay mejores argumentos,
el mejor cirujano del mundo estaría a mi disposición
y venga a conectar las viejas Arterias de mis pobres Piernas,
y entonces la Claudicación intermitente que padezco,
sería una anécdota más que una vez ocurrió en mi vida,
sería un cuento más para poder contar a mis Nietos.
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