DOMINGO DE MAÑANA

Un Domingo de mañana,

un maravilloso Domingo de mañana,

un buen y sabroso Desayuno,

una pequeña vuelta

y unas cuantas compras,

un rico Pulpo cocido con mis manos

(suena que te cagas, pero en realidad mis Manos no cuecen nada)

mis manos escriben cosas y a veces, no son lustrosas y poéticas,

son más bien rabiosas y viscerales,

que es mejor y más aconsejable no volver a leer,

porque sé que me pasé dos pueblos y medio y tres y cuatro y cincuenta,

pero lo que me importa es la sensación que me quedó por dentro,

 es cuando menos que alucinante,

después de soltar tal retahíla de barbaridades,

la paz interior se hizo conmigo

y ahora, soy un bendito Ángel con alas de fuego,

que dicen y dicen que el cagarse en todo no sirve de nada,

pero yo doy fe de todo lo contrario,

te cagas y te quedas a gusto en la paz del señor,

Domingo de mañana

que poco a poco avanza en el tiempo

y a las 13 horas ya no podemos hablar de la mañana

y en tal caso y siendo puntillosos podíamos decir 

que estamos en la hora del aperitivo....

hora de vino, cerveza y vermout

y de una sola cosa y no un poco o un mucho de todas,

tiempos aquellos donde me bebía barriles enteros de Cerveza

o del mejor vino y para guinda del pastel,

unos cuantos Vermouts que me hacían hincar la Rodilla en el suelo,

claro que todo esto, era en mi tierra Gallega

y eso suponía que por el medio, había comido unas cuantas veces,

por tanto al final, iba arrastrándome como podía hasta la noche

y entonces llegada la noche

¿no sé que podría contaros?

que iba rebotándome por las esquinas de la noche

y hasta que en una de ellas, 

presentaba mi rendición definitiva,

muerto era poco, zombi podía ser más acertado,

zombi conservado en alcohol de 90º

y esperando que un Alma caritativa me dejara en mi Casa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

JULIO CORTÁZAR