Los viejos lugares huelen a viejo. Huelen como Yo y mi casa, olemos a viejo rechumido y reseco. La historia no la cuentan los putos hechos, la historia la escriben las putadas y sino hacer memoria y ya veréis que no hay putada que se os escape. Y hablando de sierras, mejor sierra leona o mejor sierra morena. Y porque no, las dos cosas (ya quisiera Yo las dos cosas). Hay miradas que te joden y que si fuera por esas personas que te miran de esa manera, serías fulminado por un puto rayo asesino. Pero claro, tú también tienes tus armas (tonto del todo no eres) y sino funciona el plan A tienes el B en reserva.
El otro día, justo antes de empezar mi cautiverio, me señalaban como tío íntegro y responsable. Que en mi trabajo lo soy, aunque hay algunos que antes de reconocerlo, preferirían verme colgado. En realidad sino tienes enemigos es que eres una puta mierda de tío. Además, que aburrida y tediosa sería la vida sin ellos. Al final, el que seas íntegro o no, lo tendrán que decir los demás. Un premio nadie te va a dar, un abrazo o un beso tampoco. En tal caso, un reconocimiento y un reconocimiento ¿de qué? y ¿de que nos sirve ser reconocidos como seres íntegros?. Pues sirve para el Ego, para llenar el Ego, para desbordarlo como en una crecida de un río. No sé como decirlo (porque no quiero parecer un presuntuoso), pero Yo tengo un ego que no me cabe dentro. Y es más, reivindico mi Ego y me partiría la cara por él y por sus muertos.
Hoy sigo con las labores en mi casa (mi casa añeja, tan añeja y buena como el buen vino). Venga a limpiar, rascar y pintar (eso es lo que llamo, mi cautiverio). Y lo peor de todo, es que estoy en tiempo de vacaciones y ya llevo una semana consumida. Y claro y si fuera rico y todas esas cosas (que siempre se piensan y que nunca se dicen), vendría todo un equipo tipo C.S.I. y en un día o dos a lo sumo, todo estaría limpio, pintado y adecentado. Y digo Yo, que si ganara algo escribiendo, a lo mejor mi iría mejor la cosa. Pero todos mis intentos fueron inútiles y baldíos y hasta intenté meter por el medio algo de propaganda capitalista y consumista (menudo traidor estoy hecho) y pensando en sacar un mínimo para mi sustento, el de mis hijos y sobre todo, para mis putos vicios...pero señores y señoras, no soy un tío presentable y los del Google muy finamente me contestaron que el contenido de mi Blog no era para ese tipo de anuncios tan finos y delicados. Vamos que me llamaron impresentable. Claro que si me lo llama Google me llena de satisfacción (no soporto a las multinacionales y a los que piensan que el mundo es de ellos). Pues que que quede muy claro una cosa: el mundo es mío y de mis amigos. Y punto y pelota y a tomar por culo.
El otro día, justo antes de empezar mi cautiverio, me señalaban como tío íntegro y responsable. Que en mi trabajo lo soy, aunque hay algunos que antes de reconocerlo, preferirían verme colgado. En realidad sino tienes enemigos es que eres una puta mierda de tío. Además, que aburrida y tediosa sería la vida sin ellos. Al final, el que seas íntegro o no, lo tendrán que decir los demás. Un premio nadie te va a dar, un abrazo o un beso tampoco. En tal caso, un reconocimiento y un reconocimiento ¿de qué? y ¿de que nos sirve ser reconocidos como seres íntegros?. Pues sirve para el Ego, para llenar el Ego, para desbordarlo como en una crecida de un río. No sé como decirlo (porque no quiero parecer un presuntuoso), pero Yo tengo un ego que no me cabe dentro. Y es más, reivindico mi Ego y me partiría la cara por él y por sus muertos.
Hoy sigo con las labores en mi casa (mi casa añeja, tan añeja y buena como el buen vino). Venga a limpiar, rascar y pintar (eso es lo que llamo, mi cautiverio). Y lo peor de todo, es que estoy en tiempo de vacaciones y ya llevo una semana consumida. Y claro y si fuera rico y todas esas cosas (que siempre se piensan y que nunca se dicen), vendría todo un equipo tipo C.S.I. y en un día o dos a lo sumo, todo estaría limpio, pintado y adecentado. Y digo Yo, que si ganara algo escribiendo, a lo mejor mi iría mejor la cosa. Pero todos mis intentos fueron inútiles y baldíos y hasta intenté meter por el medio algo de propaganda capitalista y consumista (menudo traidor estoy hecho) y pensando en sacar un mínimo para mi sustento, el de mis hijos y sobre todo, para mis putos vicios...pero señores y señoras, no soy un tío presentable y los del Google muy finamente me contestaron que el contenido de mi Blog no era para ese tipo de anuncios tan finos y delicados. Vamos que me llamaron impresentable. Claro que si me lo llama Google me llena de satisfacción (no soporto a las multinacionales y a los que piensan que el mundo es de ellos). Pues que que quede muy claro una cosa: el mundo es mío y de mis amigos. Y punto y pelota y a tomar por culo.
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