
Mis deseos son claros,
quiero quererte sin tenerte,siempre quise eso,
desde el primer momento te quise
y en el mismo día me dije...
te voy a querer sin prisas
y sin pertenencias de ningún tipo
libremente y sin cadenas,
nuestro único vínculo sería
nuestros instantes de amor apasionado y ciego
y a su vez nuestra única causa sería
amarnos intensivamente,
amarnos hasta despellejarnos el alma
y fundir nuestros cuerpos en uno sólo...
pero la triste realidad fue otra,
y venga tira y afloja
y venga que entramos en curvas peligrosas
y la cuerda se tensó tanto...
que se acabó rompiendo,
después hubo que dedicarse a recomponerse,
juntar los trozos que habían quedado,
pegarlos como mejor se pudo
y darles un nuevo soplo de vida
y ahora somos dos cuerpos
que han pasado por una trituradora
pero aquí estamos,
o mejor dicho, aquí estoy
(sólo puedo hablar por mi)
y estoy metido en la senda del olvido,
claro que hay algunas noches,
en que te doy una vuelta por mis pensamientos,
pero en cuanto me acerco demasiado a ti,
cae una especia de espada que nos separa de nuevo,
y fuiste y un día fuiste
y ahora no eres más que polvo del camino.
No hay comentarios:
Publicar un comentario