
Viejos son mis huesos
mis pobres y delicados huesos
que poco a poco se deshacen como el yeso
y que una vez al día,
chillan mi nombre
y después, se cagan en él y en mi esencia...
dolor de vieja patria sin bandera,
dolor de estructura porosa y frágil,
dolor de reclamo,
de exigencia,
y de cagarse en toda mi existencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario