¿Qué pasa con mi alma?
está pendiente de que la juzguen
o simplemente, es como yo,
un ser dependiente de aire y viento
un ser obtuso y terco,
un ser amable de trato,
amargo algunos días,
ácido ardiente
y a veces, corrosivo.
Un ser enamorado de la vida,
que cuando se retuerce
supura saliva...
En realidad
no sé que pasa con mi alma...
pero tampoco me apuro por ello.
Mi actual filosofía vital es...
"para lo que me queda en el convento
me cago dentro"
Y no hay más
ni tampoco hay menos.

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