¿Qué, qué que pasa?...¿qué si ahora me dedico a cultivar mi ombligo?...Pues sí, es verdad y ahora veo como crecen mis hortalizas y flores en el cráter de mi Ombligo y me gusta su vista y me entusiasma ver como crecen mis entrañables vegetales. Al fin y al cabo ¿qué importa? y además ¿a quién le importa?...Yo no voy a empezar "con el nadie me quiere"...porque si nadie me quiere, ellos se lo estarán perdiendo y digo yo: odio los amores compasivos y el "pobrecito de él". Hombre, tampoco pretendo llegar a volverme loco por estar encerrado y a cal y canto en mi Cueva craneal...porque hay algunos de estos especímenes que me ponen más enfermo que el peor de los cánceres...hay algunos que son de comer aparte y de ponerles la vacuna antirrábica y en dosis de Elefante. Y hoy estaba tan tranquilo y leyendo lo que había por las redes sociales y de repente me aparece un tipo (que debió estar de vacaciones) y hace su nueva aparición como siempre:CAGÁNDOSE EN TODO Y CON MAYÚSCULAS...y yo me dije para mis adentros: yo no soporto más semejante tortura...No puedo más con lo de FASZISTA, CON EL PUTO o PUTA, con el CABRÓN o CABRONA y todo porque ya no soporto ese grado de agresividad verbal (ahora, soy más delicatessen, o sea, ahora soy más perita en dulce que antes).
Pensé: lo borro...y ni corto ni perezoso, eso hice. Yo no sé (ni quiero saberlo) si el tío en carne y hueso, se expresa de la misma forma...porque para gruñir y ladrar hay sitios especiales y que suelen estar rodeados de rejas. Vamos a ver, yo no aguanto a un fascista chulesco lleno de prepotencia y porque así lo hizo Dios, pero tampoco soporto a un fascista de izquierdas y que rezuma prepotencia y altanería por todas sus fibras...y es que el tío no se corta y digo tío, porque es un tío y digo tío, porque en todos estos casos son tíos o machos de pelo en pecho y por si me olvidaba mencionar su otra palabra más preferida: ¡COJONES!. Mira que yo había ganado en tranquilidad y mis neuronas habían descansado por fin y durante un tiempo...
Yo no sé como a través de las redes sociales a un tío de estos (por llamarle de alguna forma) se le puede tirar un hueso y para que vaya a buscarlo...y venga va y venga vete a por él y traémelo mi dulce Pit Bull (no sé si se escribe así)...Pues nada, que vuelta de mis vacaciones mentales y estivales y me encuentro y de bruces con mi mayor enemigo...Bueno, borrado y todo solucionado y de momento, ¡todo tiene solución!.
Pensé: lo borro...y ni corto ni perezoso, eso hice. Yo no sé (ni quiero saberlo) si el tío en carne y hueso, se expresa de la misma forma...porque para gruñir y ladrar hay sitios especiales y que suelen estar rodeados de rejas. Vamos a ver, yo no aguanto a un fascista chulesco lleno de prepotencia y porque así lo hizo Dios, pero tampoco soporto a un fascista de izquierdas y que rezuma prepotencia y altanería por todas sus fibras...y es que el tío no se corta y digo tío, porque es un tío y digo tío, porque en todos estos casos son tíos o machos de pelo en pecho y por si me olvidaba mencionar su otra palabra más preferida: ¡COJONES!. Mira que yo había ganado en tranquilidad y mis neuronas habían descansado por fin y durante un tiempo...
Yo no sé como a través de las redes sociales a un tío de estos (por llamarle de alguna forma) se le puede tirar un hueso y para que vaya a buscarlo...y venga va y venga vete a por él y traémelo mi dulce Pit Bull (no sé si se escribe así)...Pues nada, que vuelta de mis vacaciones mentales y estivales y me encuentro y de bruces con mi mayor enemigo...Bueno, borrado y todo solucionado y de momento, ¡todo tiene solución!.

No hay comentarios:
Publicar un comentario