Hace tiempo que no te veo
hace mucho tiempo
quizá demasiado.
Me acuerdo de tu cara
de tu sonrisa
de tus gestos
de tu habla
de tu hermosa lengua
de como nos reíamos de casi todo
éramos cómplices
almas gemelas
hermanos de sangre
y yo sabía lo que querías antes de que dijeras nada
tenía ese don,
el don de estar enamorado y entregado
y de mutuo acuerdo sacábamos conclusiones
sobre como sería nuestra vida,
el mundo era mundo desde el día en que te conocí
y nuestro futuro estaba fuera del mundo
éramos dos estrellas fugaces
dos remolinos de un viejo molino
y cuando te miraba desde la distancia
todo era brillante y alucinante
y por ti construí castillos de arena
y para conservarte dentro de esos instantes.

No hay comentarios:
Publicar un comentario