No hay ninguna razón que lo justifique todo
en el todo se esconden un buen montón de cosas
en el todo cabe lo bueno y cabe todo lo malo
y si me apuras, hasta cabe lo peor.
Yo entro en el todo
y tú también entras
y al final, entramos todos
y si somos buenos, nos darán un premio
y si somos malos, nos darán una bofetada de desprecio.
No hay peor desprecio
que la indiferencia
y no hay peor pecado
que culpar al otro y a sabiendas de que él no ha hecho nada.
Yo ahora, tengo 69 años y medio
y he visto de todo,
he visto al malo haciendo la pelota al bueno
y al bueno pregonando al malo y a todos los demás
su bondad infinita
y venderla a precio de oro
y como si la bondad fuera un valor en alza
y cuando en realidad
sufre una crisis estructural
que hace que la bondad se haya convertido en un valor venido a menos
y porque hoy en día triunfa...
el nepotismo populista y despeluchado,
el egoísmo más sórdido,
la ignominia de la vileza,
la envidia del que en teoría está tu lado,
el oscurantismo elitista y sectario
y el ponerse por encima de los demás.

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