Si hay algo que tengáis contra mí
no sé si será mejor que me lo digáis o que os lo calléis
y porque uno no siempre está preparado para recibir reproches
y para que le cuenten malas historias
y si estas son enormes y con demasiada mala leche
entonces sí que os puedo asegurar
que no estoy preparado.
Tampoco quiero palabras dulces
y que me empalaguen como un pastel de nata
y sinceramente, lo que quiero
son palabras sanas que me ayuden a salir de mi propia miseria,
y una vez que me hayan levantado del suelo
yo mismo cogeré carrerilla y saldré volando
y hasta puede que algún día y cuando miréis hacia el cielo
pase un hombre volando que va montado en una estrella fugaz.

No hay comentarios:
Publicar un comentario