Domingo 25 de agosto y ya perdí la cuenta en que día de vacaciones estoy, me parece que en el décimo día y por tanto en el ecuador, en total son 21 días, no son 24 como había dicho anteriormente. Así que en el medio de las vacaciones y el balance es contradictorio. Es bueno y positivo por el lado de romper el circulo del cansancio en que estaba envuelto, psíquico y físico y malo o relativamente malo, en que me he dejado llevar o sea me he abandonado un poco. Claro que no soy una puta máquina y a veces es bueno dejarse llevar por el día a día y por sus circunstancias.
Hoy no sé si es porque sigo cansado o por el tiempo que hace, está nublado pero con mucho calor, como se decía, día de resol, que estoy deslustrado y apocado. Aunque a lo mejor es porque no he ido a misa y dios me está castigando de nuevo y me ha obsequiado con esta empanada vital. Al final el pescado que con mi esfuerzo y el arte que tengo, pesqué, va a pasar por la sartén, hoy. ¡Joder! parece que pescar ha sido mi gran éxito vacacional y mi principal logro, que pena me doy y que pena de Bruno. Claro que hay que tener en cuenta que estas vacaciones están marcadas por la ruina económica, ruina total y absoluta y eso de por sí las ha limitado totalmente y esto no debo olvidarlo, ni por un sólo instante dejar de pensarlo, porque sino fuera así, entonces si que hubiera sido un fracaso estrepitoso y absoluto.
Por eso todo debe situarse en su punto justo y no ponerme a pensar que podía estar en Portugal o en Tarifa o en el culo del mundo y llenando mis pilas de energía, eso lo tengo aplazado, que no olvidado y pendiente de que en algún momento cambie mi suerte. La suerte viene en cualquier día, porque siempre viene, pero también se curra y se trabaja y de momento sólo puedo hacer eso, poner las condiciones idóneas para que sea bien recibida y de una vez por todas, partamos de viaje al fin del mundo.

No hay comentarios:
Publicar un comentario