No existo, a partir de ahora no existo,y desaparezco de la faz de la tierra,
y me da igual que me coma un tigre,
o que sea pasto de un naufragio,
el caso es que mi cuerpo se evapore,
y se pierda entre la espesura de la niebla.
No existo, ahora ya no existo,
he cerrado la puerta con candado,
y he puesto el cartel que reza:
cerrado por defunción,
por mi propia defunción,
y ahora estoy ocupado con mi funeral,
y mi entierro íntimo,
no quiero presencias ni almas en pena,
no quiero nada,
yo sólo sé que me quiero a mi mismo
y a mi sólo
y a mi sólo y a mi mismo.
No existo, ni existiré durante un mes,
no soy yo, ni lo seré,
no estoy, ni estaré,
no comeré, ni respiraré,
ni siquiera hablaré,
sólo escribiré sobre papel mojado,
y pondré al ralentí mi sala de máquinas,
engrasaré los tubos y engranajes,
y pondré rumbo al otro lado,
al otro lado del mundo,
y me perderé por junglas y playas desiertas,
y no sé si volveré,
y si merece la pena volver,
pues prefiero no existir,
que existir no existiendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario