Tengo que irme a comer, si no quiero desmadrar más mis horarios, son las 15,45 y creo que ya va tocando. Ahora pensaba que empiezo a estar hasta los cojones, y lo digo por las muchas referencias que hago a que antes, hace año y medio, yo era el más malo de la película y ahora soy el más bueno. Bueno pues pienso que no, que no es ni una cosa ni otra, que antes no era tan malo ni ahora tan bueno, ni tanto ni tampoco. Pero son gajes del oficio, son artimañas necesarias y son cosas que se polarizan a propósito, pues así quedan más claras y desnudas. Y eso forma parte de las terapias, ellos los profesionales te ayudan a que profundices en ellas y por tanto las polarices. Después, cuando te ven demasiado inclinado del lado destructivo, te dan un poco de mandanga o de vaselina e intentan compensarte: ¿si tampoco lo hacías tan mal?, mira como aún te quieren,etc... Pero la base y lo que subyace y de donde intentas arrancar de nuevo, es del tiempo en negativo o sea del lado de que todo lo que hiciste, lo hiciste mal y en plan absolutista.
O sea que en principio te destruyen del todo y te obligan a que ahondes en ellos, es como si te revolcaran en la mierda, en tú propia mierda y para que no hagas intentos de suicidio te inflan de medicación. Crean un bulto con ojos, o un zombie deprimido y lleno de culpa y de angustia. Pero ellos crean ese estado a propósito, pues te quedas como un niño dependiente de su madre o padre y en éste caso del psiquiatra y claro, se dedican a tirarte del hilo y tú hablas y hablas y sueltas y cada vez te vas autoculpabilizando más y más. Al final cuando te ven que estás más hundido que el Titanic, es cuando intentan que mejores el estado de tu ánimo y viene la fase del positivismo.
Tampoco fuiste tan malo (dicho con otras palabras, claro) y mira aún te quedan algunos amigos y tus hijos aún te quieren, al mismo ritmo que te van quitando la empanada pastillera. Y tú en esos momentos te agarras a las frases positivas, como si fueran flotadores. Y el caso es que esto que describí, funciona. Claro que es a base, primero de descerebrarte y después recomponerte y en eso se basan hoy en día las terapias. No siempre ni todo el mundo queda bien, hay gente que no sale de su estado inicial, otra que se queda en la primera fase y se queda más hundida que antes de empezar y por fin, hay una minoría que asume ambos aspectos y sale triunfante y por la puerta grande.
No sé cuanto durará ésta fase, de momento dura año y medio y por supuesto espero que dure para siempre. Ahora siento que estoy lleno de vida y que mi droga preferida es ella, es la vida y en su estado más puro. O sea que estoy colocado, puesto y ciego de vida. Pero a lo que iba al principio, es que ya no hace falta que me martirice más con lo que era y a base de ensalzarme con lo que soy ahora, pues la base es la misma, soy yo y soy la misma persona. Ah¡¡ y gracias por escucharme.

No hay comentarios:
Publicar un comentario