¡Buenos días! y ¡tan buenos!. Aquí en Menorca hoy día 18 de Marzo debía de ser declarada oficialmente la Primavera. No sé a que día corresponde en el calendario, pero hoy es palpable la Primavera. Solete calentito y luz brillante. Y que gusto y que placer da, da ganas de ponerse en pelota picada y darse un baño en la cala que tengo al lado. Se llama Cala Sant Esteve y es una preciosidad de cala. Pero, pero mi cuerpo aún no está al completo, le queda un ligero puntito para ser lo que era. De todas formas yo no soy muy de baños, lo digo y lo digo con la boca pequeña y por eso de decir que soy un tío que me enredo con la naturaleza, pero bañarme es pedirme demasiado.El agua aún está muy fría, pues tarda en empezar a calentarse. En Abril o Mayo, puede que ya esté templada o sea que de momento el agua queda para los peces. Es una sensación de desear algo, pero sabiendo que no se va a realizar. Es como cuando ves una gran montaña y con la nieve en su cima y tú pensamiento es desear estar en la cima y sabes perfectamente que nunca llegarás a hacerlo y todo se queda en eso, en un deseo.
De todas formas hay una calita muy chiquitita y entrañable que si me hace dudar. Tiene una playita de 4 metros y el resto es roca, pero roca alta y es como un tajo, estrecha y bella. Los sonidos rebotan en sus paredes rocosas y todo es placidez. Ésta última, se llama Cala Rafalet. Un dedo fino de agua que penetra en la roca.La verdad es que me gustaría ser más hombre y sin pensarlo tirarme al mar. Bueno hombre, mujer o cosa, pero me gustaría ser algo más valiente y emocional. Ésta Isla tiene rincones escondidos, tiene calas del paraíso y tiene aguas de cristal. Su gran riqueza es el mar. Y no es la vaca Frisona, vaca gorda y llena de leche, vamos una vaca más.
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