
Es que no puedo más,
ando y me caigo,
pienso y se me caen los pensamientos,
dudo y me confundo,
nado y porque sino me hundo,
vivo, ¡si yo vivo!,
vivo cada día de mi vida,
vivo hasta dormido,
vivo con mis historias,
y que a veces son paranoias,
pero sigo vivo,
y cuando siento,
me compenso o me equilibro,
un poco de sufrimiento
y un mucho de cariño,
un poco de dolor
y un mundo de caricias,
y así doy en el punto justo,
y en ese mismo punto,
donde se encuentra mi equilibrio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario