MÁS VALE PREVENIR

Si alguien piensa que le voy a decir que bien y no te preocupes, cuando lo ha hecho fatal y todo por su puta desgana, conmigo va de culo y sin frenos. Otra cosa es que pusiera todo su entusiasmo en el intento, ahí tengo que callarme y mostrarle mis respectos. Pero yo ya no comulgo con ruedas de molinos y menos con el pobrecito de mi y al mismo tiempo, rascándose los huevos. En esto, soy inmisericorde y no perdono. No perdono a los flojos, a los que aparentan que hacen y que siempre se quejan.

Y es que pasa eso, que los que menos hacen, son los que más se quejan. Aparte que hay algunos que son reivindicativos y tienen un rosario de derechos y en cambio se le olvidan sus deberes. Y aquí o allí o en donde sea, vivir de la sopa boba como que no. Vamos a ver, que yo puedo escribir porque me lo he currado y me lo sigo currando y tengo claro que esto solo me alimenta espiritualmente, por lo que deduzco que para comer todos los días, me lo tengo que ganar a pulso en mi curre y en todos los días del año.

Todo esto para que quede clarito todo y también para reafirmarme en mis razonamientos. En tiempos en que era tonto del culo, hará 30 años de esto, ya dejé entrar en mi casa a gente como ésta y venga a chupar de uno y venga que no puedo currar en esto y venga que si puedo salir de noche y déjame pasta y venga a tirar del bolsillo del gilipollas de turno y además, que al final para echarlos de mi casa, casi tengo que llamar a la policía. O sea que más vale prevenir que después lamentarse.